/ viernes 5 de julio de 2024

El que llega: ¿un congreso parejo?

No recordamos, al menos en la historia reciente, una legislatura de alianzas entre partidos que se dividieran las curules por partes iguales y un partido cerrando la pinza. En teoría, se supone, que podría ser una legislatura complicada para quien despacha en el Bicentenario, pero en los hechos, hay que esperar las circunstancias políticas del momento.

MORENA y sus aliados, al igual que el PRI y el PAN, pueden hacer historia política y legislativa, a la hora de votar iniciativas, leyes o decretos.

Históricamente, ninguna legislatura logra llevar al pleno para votar todas las iniciativas que se discuten en las comisiones respectivas, por esa razón, hay rezagos en el congreso.

Entendemos que la sociedad elige a sus representantes populares en el congreso, para que cumplan su función principal: legislar. Pero en ocasiones, vemos que muchas de las iniciativas llegan, pero terminan politizándose y se desvían del objetivo principal; votar a favor de los intereses de los ciudadanos. Se debería evitar, convertir a las sesiones del pleno en una arena política para estar a favor o en contra de algo, por intereses de partido o personales.

Ya está muy cerca, el reparto del pastel de la próxima legislatura y la cereza de dicho pastel: la presidencia de la coordinación política del congreso. Todos sabemos que en las comisiones al interior de la cámara del congreso local, hay de primera, de segunda y hasta de tercera. En este contexto, tendría que ser muy bien cuidado, el tema de los perfiles que encabecen o integren las comisiones. No debería ser como muchas veces sucede, privilegiar los intereses políticos, en lugar de los perfiles académicos de quienes fueron electos diputadas y diputados.

Hablando de mujeres y de traiciones, por parte de los aliados de MORENA, Sandra Amaya volverá a ser la figura más importante y le podría ayudar, la llegada otra vez, al congreso de Otniel García Navarro. Por los de enfrente imaginamos que Ernesto Alanis será importante, impulsado desde el Bicentenario, responsabilidad que será definitiva para su proyecto y futuro político. En este tema, Alejandro Mujica que también repite como diputado local, será sin duda de mucha ayuda haciendo mancuerna con Ernesto Solís.

La sociedad estará muy atenta, de la próxima legislatura que entra en funciones a partir del primero de septiembre. Pero sobre todo, del desempeño de las diputadas y diputados, que repiten y los que llegan por primera vez, como dato cultural, cada coalición contará con doce curules. Y ya encarrerado el gato, las miradas estarán puestas en lo que haga Martín Vivanco a la hora de la verdad en el congreso. Por preparación académica no queda, Es de lo mejor, solo falta ver si políticamente funciona el interior del congreso.

No recordamos, al menos en la historia reciente, una legislatura de alianzas entre partidos que se dividieran las curules por partes iguales y un partido cerrando la pinza. En teoría, se supone, que podría ser una legislatura complicada para quien despacha en el Bicentenario, pero en los hechos, hay que esperar las circunstancias políticas del momento.

MORENA y sus aliados, al igual que el PRI y el PAN, pueden hacer historia política y legislativa, a la hora de votar iniciativas, leyes o decretos.

Históricamente, ninguna legislatura logra llevar al pleno para votar todas las iniciativas que se discuten en las comisiones respectivas, por esa razón, hay rezagos en el congreso.

Entendemos que la sociedad elige a sus representantes populares en el congreso, para que cumplan su función principal: legislar. Pero en ocasiones, vemos que muchas de las iniciativas llegan, pero terminan politizándose y se desvían del objetivo principal; votar a favor de los intereses de los ciudadanos. Se debería evitar, convertir a las sesiones del pleno en una arena política para estar a favor o en contra de algo, por intereses de partido o personales.

Ya está muy cerca, el reparto del pastel de la próxima legislatura y la cereza de dicho pastel: la presidencia de la coordinación política del congreso. Todos sabemos que en las comisiones al interior de la cámara del congreso local, hay de primera, de segunda y hasta de tercera. En este contexto, tendría que ser muy bien cuidado, el tema de los perfiles que encabecen o integren las comisiones. No debería ser como muchas veces sucede, privilegiar los intereses políticos, en lugar de los perfiles académicos de quienes fueron electos diputadas y diputados.

Hablando de mujeres y de traiciones, por parte de los aliados de MORENA, Sandra Amaya volverá a ser la figura más importante y le podría ayudar, la llegada otra vez, al congreso de Otniel García Navarro. Por los de enfrente imaginamos que Ernesto Alanis será importante, impulsado desde el Bicentenario, responsabilidad que será definitiva para su proyecto y futuro político. En este tema, Alejandro Mujica que también repite como diputado local, será sin duda de mucha ayuda haciendo mancuerna con Ernesto Solís.

La sociedad estará muy atenta, de la próxima legislatura que entra en funciones a partir del primero de septiembre. Pero sobre todo, del desempeño de las diputadas y diputados, que repiten y los que llegan por primera vez, como dato cultural, cada coalición contará con doce curules. Y ya encarrerado el gato, las miradas estarán puestas en lo que haga Martín Vivanco a la hora de la verdad en el congreso. Por preparación académica no queda, Es de lo mejor, solo falta ver si políticamente funciona el interior del congreso.