Claudia Sheinbaum la sexagésimo sexta (66) Presidenta

Andrés Manuel López Obrador fue el sexagésimo quinto Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, y el martes 1 de octubre próximo pasado le entregó el cargo –a través de la Banda simbólica Presidencial- a Claudia Sheinbaum Prado, y con ello López Obrador inicia su retiro de la vida pública, y su vida privada la dividirá entre su rancho de Palenque y su casa en Tlalpan de la Ciudad de México. Analicemos la salida de AMLO y la entrada de CSP.

AMLO señaló que “sí puedo decir misión cumplida”, que en el tiempo de transformación lo más importante es la acción; las últimas reformas constitucionales que promulgó fueron una para militarizar a la Guardia Nacional y la otra, para reconocer los derechos de los pueblos indígenas y loa afromexicanos. La mañanera fue su palestra diaria donde constantemente hacía los contrastes de las políticas sociales y económicas de la Cuarta Transformación y el periodo neoliberal. Su modelo lo llamó “Humanismo Mexicano”, basado en dos vertientes: una en nuestra rica y fecunda historia cultural -una de las seis primeras civilizaciones de la humanidad- y en sus tres principales movimientos sociales que han hecho posible el México que gozamos. En su última mañanera –de las mil 438 que realizó- pronunció su último mensaje, señalando la creación de 22.4 millones de empleos formales, salario promedio de 17 mil 691 pesos mensuales, una apreciación de 3.3 por ciento del peso frente al dólar y el primer sexenio sin devaluación desde 1970. Más de 4.3 billones de recaudación, 31 mil millones de dólares en inversión extranjera directa y 110 por ciento de incremento en el poder adquisitivo. Se refirió al reparto para ricos y pobres: 272 mil 600 millones de pesos en utilidades de la banca comercial y una bolsa de 745 mil millones de pesos para programas sociales. Procedió a rifar entre los periodistas asistentes a la última mañanera un reloj de mano “de 2 mil 500 pesos”. Sus colaboradores más cercanos, incluyendo a su esposa Beatriz, le habían ocultado una producción musical, una adaptación de la canción “La Paloma”, misma que lo hizo llorar en el Zócalo durante la toma de la Avenida Reforma en protesta por los resultados electorales de 2006. Terminó la última mañanera y procedieron a disfrutar los tamales. Develó la pintura con su efigie que permanecerá en los pasillos de Palacio Nacional. Comió en privado con sus homólogos de Brasil, Chile Cuba, Colombia, Belice, Honduras y Guatemala. A las 17:38 horas salió de Palacio Nacional en una camioneta blanca a su domicilio particular de Tlalpan, ya que el primer minuto del martes dejaría de ser el Presidente de México.

Una encuesta de la firma Poligrama reveló que el 65.5 de las personas encuestadas aprueba la gestión de AMLO (2018-2024) y el 34.5% la reprueba; señala que el principal logro fue la reducción de la pobreza en 5 millones de personas y apoyos sociales con el 43.1%, en segundo lugar con el 20.6% fue el combate a la corrupción; le siguieron los grandes proyectos: con el 14.2% el Tren Maya; el 6.3% el combate a la inseguridad. Es un hecho que AMLO rompió moldes y cánones del modelo neoliberal que privilegió a los sectores más altos en detrimento de la clase trabajadora. Tuvo el mérito de replantear los programas sociales como programas universales y sin intermediarios, además los plasmó como un derecho en la Constitución. Sólo el tiempo lo dirá si hizo mucho o poco. ¿Usted qué opina, lector de El Sol de Durango?

Claudia Sheinbaum Pardo como estudiante en la UNAM fue una activista social en el movimiento para que los jóvenes fueran aceptados sin pagar las altas cuotas que pretendió imponer el Rector Carpizo, creando el Consejo Estudiantil Universitario (CEU) donde también fue líder quien sería su primer esposo Carlos Ímaz Gispert, de quien se divorció ya que salieron a la luz videoescándalos en los que recibía efectivo de manos del empresario argentino Carlos Ahumada. Estudió Física en la UNAM, así como Maestría y Doctorado en Ingeniería en Energética y Ambiental, becada para una estancia académica en el Lawrence Berkeley National Laboratory de la Universidad de California en Estados Unidos. Académica reconocida y de prestigio internacional, autora de más de 100 publicaciones especializadas y dos libros sobre energía, medio ambiente y desarrollo sustentable, con más de 2,700 citas en artículos e investigaciones académicas. López Obrador la invita para ocupar la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México cumpliendo con la construcción del segundo piso del Periférico; en el 2001 volvió a recorrer el país con López Obrador para formar el partido Morena; en el 2006 Obrador la invitó a la campaña presidencial; ex gobernante de la ciudad con más habitantes en el país, la Ciudad de México con 9 millones de personas; y cristaliza su carrera política al llegar al máximo cargo de la administración federal, la Presidencia de la República con la tarea de continuar con el proyecto de la Cuarta Transformación. Después de 200 años de vida republicana, llegó una mujer a la Presidencia. Tomó protesta en el recinto de San Lázaro, con más de mil invitados, entre ellos mandatarios extranjeros, embajadores y comitivas de 105 países. La Suprema Corte de la Nación estuvo presente. Ifigenia Martínez -ejemplar mujer militante en la izquierda de 92 años de edad- solicitó a Claudia tomar protesta ante el Congreso de la Unión. El Presidente saliente Andrés Manuel López Obrador hizo entrega de la Banda Presidencial a Ifigenia Martínez, quien, a su vez, la entregó a Claudia Sheinbaum y se la colocó con la ayuda de la durangueña la cadete militar Juana Jazmín Acosta Torres, quien estudió en la Telesecundaria número 64 de Pino Gordo, Pueblo Nuevo, Dgo., originaria de El Nayar, Durango, con 25 años de edad. La Presidenta dio un mensaje a la Nación, destacando como en la tarde en el Zócalo al recibir el Bastón de Mando de los pueblos indígenas: “es tiempo de mujeres”. Inició con 63% de opinión favorable.

Sheinbaum nace en la Ciudad de México hace 62 años de edad, casada con su ex novio y compañero universitario Jesús María Tarriba. Es la segunda hija del matrimonio de Carlos Sheinbaum Yoselevitz, cuya familia llegó a México desde Lituania en la década de 1920, nació en Jalisco y fue un ingeniero químico que se desarrolló por 55 años en una empresa dedicada a elaborar aceites para curtir pieles, fue un asiduo activista de la izquierda mexicana y gracias a ello Claudia se desenvolvió a la perfección en actividades políticas durante su etapa universitaria, lo que la llevó a tener el lugar que hoy tiene en el ruedo político del país, era fanático de Juan Gabriel, la música fue una de sus grandes pasiones, además, destacó su gusto por hacer ejercicio, leer el periódico y ser un gran aficionado del Atlas, además, tanto él como su esposa fueron parte del movimiento estudiantil de 1968 y siempre se mantuvieron firmes en su ideología hasta su muerte en el 2013. Su mamá, Annie Pardo Cemo, proviene de una familia sefaradí de la ciudad de Sofía en Bulgaria que llegó a México en la década de los 40 huyendo del Holocausto, nació en México y se desarrolló en el campo de la biología molecular en la UNAM, institución de la cual es profesora desde hace 53 años, gracias a su destacado trabajo ha ganado diversos premios entre los que destacan el Anual de Investigación Fundación Glaxo en el 92, el Premio Canifarma de Investigación Básica y el más reciente, el Premio Nacional de Ciencias 2022, el cual es otorgado a quienes destacan por su trabajo docente, de investigación o divulgación de la ciencia, pertenece a sociedades científicas nacionales e internacionales, entre ellas la American Society for Cell Biology y la European Respiratory Society.

En México 51.1% son mujeres. Y es tiempo de mujeres: gobernadoras, titulares de los tres poderes, secretarias de Estado y lo que viene. Lo mejor para la Presidenta Claudia, si le va bien, nos irá bien a todos los mexicanos. Así sea.