Hace unos días se realizó la World Health Summit 2022 de la OMS, con sede en la ciudad de Berlín, Alemania. En ella se dieron cita especialistas, parlamentarios y mandatarios de 141 países, en los que estuvo incluido México, como una voz referente en salud.

Acudí a la reunión con la representación del Senado Mexicano, invitación por la cual se reconocen los esfuerzos realizados para transformar y mejorar el sistema de salud en beneficio del pueblo mexicano, destacando que el acceso a la salud sea ya un derecho constitucional para las y los mexicanos, coincidencia con varios países en el mundo.

En las mesas de trabajo se analizaron cómo prevenir y contener las distintas enfermedades como la tuberculosis, la polio, el cáncer en sus diferentes variables, el papel de los sistemas de salud y sobre todo las tareas que les competen a las y los legisladores.

En la inauguración estuvo presente el titular de la OMS, Tedros Ghebreyesus, quien habló sobre la relevancia de la arquitectura de la salud y la seguridad sanitaria, entre otros temas.

En las sesiones en las que se trató la problemática del continente americano, se destacó la relevancia de los parlamentarios para que se realicen las adecuaciones a las legislaciones y se implementen las medidas para un mejor acceso a la salud, sin desligarla de los procesos sociales, económicos y ambientales.

En México aún seguimos con rezagos añejos en materia de salud, tenemos mucho por hacer en favor de la justicia social; no es el momento de regatearle a la población lo que durante décadas se le ha negado, es el momento en que prioricemos la responsabilidad que el pueblo nos ha conferido.