La sumisión del nuevo INE a AM López Obrador evidencia la poca o nula organización para regular y controlar el proceso electoral ya en juego, la autoridad electoral terminará alineada al presidente.
Nada fuera de lo común, lo mismo que hicieron y hacen los órganos autónomos por ley: El INE, el de competencia económica, el de telecomunicaciones al servicio del Slim.
El de derechos humanos que debería de tener su oficina en Palacio Nacional. Ninguno de estos supo manejarse como el INEGI (el único órgano no vilipendiado en la mañanera) que hace malabarismos para maquillar cifras a su gusto. Es ridículo pues que voceros de la oposición hablen de esos órganos en baluartes de la democracia. Entes mozos del poder como el de transparencia de la información pública que despertó por la amenaza del presidente de despedirlos. Como dijo Fernández Noroña, burócratas de élite que trabajan para cobrar. Si el presidente supiera plantear las cosas y ofreciera alternativas, sería masiva la petición de cancelarlos, justificaría con creces la austeridad republicana.
El frente opositor no enseña color, no da señas de organización, menos de coherencia y congruencia, aspecto muy difícil en esa mezcla de burócratas y fraternidad de lamentaciones, como dice Silva Herzog. López Obrador y la 4T tampoco tienen materia y método de partido para desplegar proselitismo con proyecto. Aluden al pueblo, sin conceptos de categoría política, una mención anacrónica de masa o conglomerado. La definición de pueblo y partido fueron reelaboras por el materialismo histórico que precisa sus objetivos históricos.
En difuso panorama resalta la precandidatura de Morena a la CDMX. López Obrador no entregó el mando de la 4T a Claudia Sheinbaum, se le está olvidando que debido a tantas facultades legales y de hecho que tiene la presidencia, el poder sólo dura seis años.
Si en Morena se dicen de izquierda y no son, tampoco son populistas, populismo criollo sólo tiene el elemento menos importante de fascismo, al que refieren con estribillos izquierdistas vulgares, a caciques, dictadores y represores.
Claudia Sheinbaum quiere a Omar García Harfuch para la CDMX porque puede sumar votos de sectores medios y Clara Brugada no lo haría. Hay escritores que fustigan el expediente policiaco de García Harfuch y son escurridizos para señalar la expansión del ejército.
Los campos están definidos, y es probable que si Xóchilt Gálvez tiene equipo, pueda de obtener votos de los que Morena tiene en la bolsa clientelar. García Harfuch puede obtener apoyo en sectores que rechazan a Morena en la CDMX. Habrá problemas en la 4T si el presidente no suelta el bastón que dijo haber entregado. Un día permite descalificar la G. Harfuch y al otro lo convencen de lo contrario, en el equipo de Sheinbaum registran que hay colaboradores cercanos del presidente que atizan el fuego. Nuestra idiosincrasia y tradición acepta el presidencialismo, su fuerza vertical, incuestionable y omnímoda.
Señales de contrariar a la heredera causaran demasiados problemas en una organización sin bagaje político, sin dimensión territorial socializada. No se puede esperar debate, negociación y acuerdo sin llegar al choque si Morena no tiene un andamiaje para solventar la práctica política. Un riesgo para el resto de la sociedad por la presencia nacional de Morena, y la poca integración y propuesta del frente opositor.
Por otra parte, el presidente nunca ha preferido a los pocos de izquierda que lo siguieron, a excepción de Pablo Gómez y Alejandro Encinas. Un error descalificar a Julio Hernández, el Astillero, ha substanciado las ideas pergeñadas en la mañanera, y es un probado militante de izquierda.
No lucirán convicción por Morena todos aquellos aspirantes a puestos de elección excluidos con supuestas encuestas, y se prefirió a amigos corruptos y sospechosos de crimen organizado.
El ambiente recomienda no atender publicidad de los precandidatos locales, todos son pan con lo mismo, Morena podría contar con candidatos no agachados con métodos de selección democráticos.
No lucirán convicción por Morena todos aquellos aspirantes a puestos de elección y se prefirió a amigos corruptos y sospechosos de crimen organizado.
