José de la O Holguín en cada uno de sus artículos interpreta los aspectos sociales, políticos, administrativos, relacionados con la educación, la historia y la cultura, y busca promover el arraigo y la identidad durangueña convocando la reflexión y el análisis sobre los hechos que han marcado nuestra sociedad, como lo muestra en su libro "Crónicas periodísticas".
De esta manera, de un modo dinámico muestra el contenido de una selección de 250 crónicas periodísticas con temática de interés, local y regional que buscan promover nuestra identidad y nuestra cultura expresados a lo largo de 18 años en las páginas del diario "El Sol de Durango".
Así, a través de la crónica periodística, conocemos artículo tras artículo la visión de la labor y del esfuerzo de quienes nos han dado identidad y ha mostrado el actuar de nuestra gente, y brindar un reconocimiento a los creadores e impulsores de la cultura en todos los rincones del estado en las artes, en la lucha social y en la comunicación.
Para mi amigo José de la O, la cultura no es únicamente el tenor limitado a las Bellas Artes, o restringida a las paredes de los museos o de los teatros, sino que se lleva en el quehacer cotidiano para construir y hacer de nuestra una mejor sociedad un espacio donde podamos vivir plenamente e inmiscuidos con ese sentido de pertenencia e identidad que ofrece Durango.
Además de su perspectiva personal sobre los hechos que han marcado el rumbo de nuestra patria, el autor nos ofrece también una visión de los duranguenses más allá de nuestras fronteras ya que sus artículos publicados en el periódico abarcan temas diversos, por lo que podemos encontrar la Independencia o la Revolución, los artistas, los lugares, el villismo, la educación, la cultura y la sociedad.
Aparecen en estas páginas los creadores y promotores de nuestra cultura, que han formado el sentido de durangueñeidad de la que hoy gozamos y han puesto en la balanza nuestros valores que nos dan sentido comunitario y que nos identifican alrededor del mundo, por lo que podemos encontrar la narrativa de Francisco de Ibarra, Guadalupe Victoria, Francisco Villa, Francisco Castillo Nájera Ricardo Castro o Francisco Montoya de la Cruz, lugares como Rodeo, Gómez Palacio, Santiago Papasquiaro o la propia capital el Estado, o los festivales de música y las fiestas patronales, además de la labor emprendida por los masones o los cronistas municipales.
De esta manera de la Holguín, plasma a través de sus artículos que forman parte de la crónica periodística la pasión y el trabajo de hombres y mujeres que han amado intensamente a Durango a sus ciudades y a su gente y que han aportado su talento y creatividad para el deleite orgullo de los actuales y futuras generaciones.
De la misma manera, pone a la vista los sucesos y las acciones emprendidas a favor de la promoción de la cultura desde su perspectiva, toda vez que ha dirigido la Red de Escritores Independientes y la Asociación de Cronistas Municipales.
Así, podemos conocer no sólo los acontecimientos que ahora forman parte de nuestra historia, sino también hurgar en el lado humano de nuestros personajes y comprender las circunstancias que forjaron su carácter.
Como lo menciona el propio autor, el libro pretende fomentar la durabilidad considerando su significado como un rasgo que va más allá del gentilicio y nos identifica a los que exaltamos a nuestra patria chica, contagiándonos de una identidad excepcional en el contexto geográfico, que nos una en el sentimiento y en la acción que nos lleve a ser mejores como sociedad, aliados con nuestra propia cultura.