Renunció al pecado original la dulce niña Valentina Ortiz Vázquez, así que fue transformada en una sola Criatura y hasta la vida Eterna, al recibir el primer sacramento que obliga la iglesia católica, su bautizo, ese día especial la nena fue llevada a la pila bautismal del Templo de Santa Teresita del Niño Jesús, y fungió como su padrino de óleos, el párroco Juan Antonio Chávez Pérez.
La nueva cristiana es heredera del matrimonio formado por los señores, Marco Antonio Ortiz Nava y Miriam Grisel Vázquez Encinas, quienes dichosos llevaron a su heredera a recibir la Luz de Cristo, para que camine siempre como hija de Dios.
Asimismo participaron como padrinos de honor, los señores Luis Enrique Santander Aguirre y Martha Adela Aguirre Leyva, quienes dichosos aceptaron el participar como segundos padres para su nueva ahijada.
Al culminar el acto protocolario se ofreció una elegante recepción, la cual tuvo lugar en conocido salón de la localidad, ahí se dieron cita familiares y amistades muy cercanos a la familia anfitriona, con quienes compartieron el pan y la sal, para disfrutar juntos de la exquisita comida y bebidas selectas para la ocasión.
Entre los presentes estuvieron abuelitos, tíos, primos, así como la hermanita de la dulce celebrante: Mía Ortiz, entre otras familias más, que llenaron de cariñosos besos y lindos momentos especiales, a la nueva hija de Dios Padre, fue un acontecimiento muy significativo en sus vidas. ¡Felicidades a los padres por este hermoso momento!