Durante una emotiva ceremonia que tuvo como marco la pila bautismal del Templo de Santa Rosa de Lima, la encantadora nenita Arlet Ruteaga Serna recibió el primero de los sacramentos instituidos por la iglesia católica: el bautismo.
- Te puede interesar: Sebastián Burciaga Orozco es Mr. Teen Durango Designado
Para este momento tan especial Arlet lució un precioso ropón confeccionado en finas telas con hermosas aplicaciones que la hizo lucir realmente encantadora.
Ella estuvo acompañada de sus papás, los señores Gloria Madai Serna Aguirre y David Ruteaga Campos, quienes decidieron invitar como padrinos de su heredera a los señores Edna Livier Serna M., y Steven Aviña, quienes se comprometieron ante el sacerdote oficiante a encargarse de encaminar en la fe católica a la pequeña a lo largo de toda su vida.
En la celebración destacó el padre que ofició el acto que a través del bautismo entramos a formar parte de la Iglesia y nos convertimos en hijos de Dios. Un sacramento que se recibe una vez en la vida y que imprime carácter.
Les dijo también que esta ceremonia está contenida en su ritual propio: el ritual del bautismo de niños. Como todos los demás rituales, antes de ofrecer los textos y las rúbricas de la celebración, encontramos una sección introductoria, llamada técnicamente los praenotanda, término en latín que podríamos traducir, de forma libre, como orientaciones previas. Es lo mismo que la ordenación general que encontramos en el Misal Romano.
Destacó que en ella se nos hablan de muchas cosas, por ejemplo, comienzan situando el bautismo dentro de los Sacramentos de Iniciación Cristiana, describiendo más adelante lo que el bautismo es desde el punto de vista teológico: sacramento de la fe, incorporación a la vida de la Iglesia, nacimiento a la vida de Dios y participación en el Misterio Pascual.
Les comentó también que mucho antes de ser nuestra la ceremonia, la celebración es de Dios mismo, de Cristo, y también de la Iglesia. Dijo que era importante destacar que en el ritual el bautismo de niños se nos habla de la importancia de los padres en el antes y después de la celebración. En concreto, cuando habla de la función antes de la celebración, plantea que es responsabilidad de los padres el tener una formación adecuada de cara a una celebración consciente, al igual que quienes habrán de fungir como padrinos de la pequeña.
El papel de los padres es fundamental, especialmente en algunos momentos: cuando piden públicamente que sea bautizado el niño; cuando lo signan en la frente, después del celebrante; cuando hacen la renuncia a Satanás y pronuncian la profesión de fe; cuando llevan el niño a la fuente bautismal (función que corresponde principalmente a la madre); cuando encienden el cirio; o cuando reciben la bendición especial destinada a las madres y a los padres.
Una vez que les dio a conocer esta información, el padre procedió a bañar con las aguas benditas del Río Jordán a la pequeña Arlet a quien además le impuso su nombre.
Al término de la ceremonia familiares y amistades de los esposos Ruteaga Serna, entre ellos sus abuelos Miguel Ángel Ruteaga Martínez y Beatriz Campos Soto, además de sus hermanos Aranza y Miguel Ángel Ruteaga Serna se acercaron a ellos para felicitarlos y posteriormente se trasladaron a una sesión fotográfica con la profesional Eliana Leyva y más tarde les acompañaron durante una espléndida recepción ofrecida en conocido salón de eventos sociales, en donde los padrinos repartieron bonitos bolos a manera de recordatorios.