Hannia Edith Castrejón Chávez lució encantadora cuando se postró ante los ojos de Dios en la Catedral Basílica Menor de Durango. para darle gracias por permitirle llegar a sus quince años.
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Para este momento tan especial la guapa quinceañera se hizo acompañar de sus orgullosos padres los señores Erasmo Castrejón y Genoveva Chávez, además de sus padrinos María del Socorro Mesta y Alberto Mesta, quienes unieron sus oraciones a las del sacerdote oficiante para pedirle al Altísimo que la continúe llenando de bendiciones.
Hannia Edith lució un espectacular y mexicanísimo atuendo en color negro con aplicaciones de flores multicolores bordadas y con pedrería incrustada que la hizo ver realmente encantadora y con un maquillaje y peinado bellamente elaborados por parte de su tío el estilista Joan Cocoo.
En la misa de acción de gracias el sacerdote oficiante se dirigió a la quinceañera para felicitarla con motivo de su celebración, además de decirle que siempre viva con agradecimiento al Creador y a sus padres que le han brindado una educación ejemplar, con principios morales con los cuales la conminó a continuar su vida.
Posteriormente el padre destacó la importancia de que toda joven sea acercada a la iglesia para agradecer a Dios Nuestro Señor por dejarla celebrar de esta manera sus quince años.
Destacó el padre que esta celebración revestía una gran importancia en la vida de Hannia, quien visiblemente emocionada participó con una lectura bíblica en la celebración de la santa misa que su honor se realizaba.
El padre destacó que esta nueva etapa en la vida de Hannia significaba una gran importancia, ya que a partir del momento dejaba de ser una niña para convertirse en una mujer comprometida con la sociedad y su familia, además de sus estudios para forjarse como todo un ser humano con ganas de triunfar y salir adelante.
Finalmente pidió un aplauso de la concurrencia que se dio cita para acompañar a la joven quinceañera quien posteriormente fue objeto de múltiples felicitaciones por parte de sus familiares y amistades que se dieron cita, quienes además no perdieron la oportunidad de tomarse las fotografías del recuerdo de ese bonito acontecimiento social.
Al término de la ceremonia todos los ahí presentes se trasladaron a un conocido salón de eventos sociales, el cual lució preciosa decoración para recibirles y celebrar los quince años de Hannia.
Los asistentes brindaron por la felicidad de la quinceañera y disfrutar de un riquísimo banquete que se sirvió especialmente para la ocasión y pasaron momentos muy gratos a su lado, los cuales seguramente habrá de saber atesorar por el resto de vida.