Cuando una mujer cumple quince años, es un excelente momento para apoyar sus sueños que comienzan y las metas que empiezan a trazarse… con esa alegría y frescura de juventud así celebró la llegada de sus quince años, la guapa señorita Daniela Nohemi Hernández Ceniceros, y para conmemorarlo contó con el entusiasmo y apoyo de sus orgullosos padres, así como de hermanos y demás seres queridos, quienes se postraron ante el Señor, en una emotiva celebración, en el Templo de San Luis Batiz.
- Te recomendamos: Un nacimiento con más de 30 años de tradición
Sus orgullosos padres, señores Oscar Daniel Hernández Espinoza y Tomasa Ceniceros, quienes en todo momento se mostraron contentos y dichosos por ver crecer a su linda hija y convertirse en toda una señorita. Rodeada del cariño y amor de sus seres amados la feliz quinceañera celebró la llegada a la edad más importantes entre las chicas, donde tuvo la dicha de estar acompañada por sus padrinos, señores José Antonio Hernández López y Beatriz Calderón, quienes muy emocionados estuvieron todo el tiempo acompañando a su querida Dany–como le dicen cariñosamente-.
Presentes desde luego estuvieron los hermanos de la feliz festejada, Miguel Ángel y Zulema Hernández Ceniceros, así como sus demás tíos y primos, entre otros invitados más. Luego de la emotiva ceremonia Eclesiástica los invitados se dirigieron a un salón por Rinconada Sol, donde se ofreció la espléndida recepción en honor a la feliz Dany quien muy emocionada arribó al lugar acompañada de su orgulloso padre, para juntos iniciar con el tradicional vals, el tema fue: “No Crezcas Más”.
Los felices invitados se mostraron entusiasmados por acompañar a la quinceañera en tan importante evento para su vida, demostrándole en cada momento el amor y cariño que le tienen, el cual es único e incondicional. Al evento se dieron cita, familiares que vinieron ex profeso de: Zacatecas y Torreón, Coah., entre muchos invitados más.
Todo transcurrió en agradable armonía, pues no faltaron los momentos de buen humor y de un lindo ambiente, además de la sana diversión en que se festejó como se merece a Dany, quien ahora emprende este hermoso camino, llamado juventud. Muchas felicitaciones a la quinceañera, quien ese día gozó al máximo de su fiesta, con todos sus invitados, quienes no la dejan sola en ningún momento en los festejos de su vida. Enhorabuena.