En el Templo de la Resurrección del fraccionamiento Guadalupe tuvo lugar la misa de acción de gracias con motivo de sus quince años de la joven Diana Valdez Rodríguez, quien para la ocasión lució un atuendo en blanco y azul finamente bordado.

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El recinto lució preciosa decoración con arreglos florales y cirios blancos que se encendieron para darle la bienvenida a la joven quinceañera, quien en esos momentos tan emotivos estuvo acompañada de sus padres los señores Sergio Valdez Hernández y Betina Rodríguez Vargas, además de sus padrinos César Valdez Hernández y Claudia Briones López.

Ante la audiencia el sacerdote oficiante se dirigió a Diana para felicitarla por el noble gesto de postrarse ante los ojos de Dios para agradecerle el poder haber arribado a esa bonita edad que representa toda ilusión en las jovencitas de su edad.

Agregó el padre que esta ocasión de sus quince años de Diana son una celebración tradicional de la vida y de agradecimiento a Dios en la ocasión de este cumpleaños de las jóvenes como ella. Agregó que este ritual le da énfasis al paso de niña a mujer, pero siempre con responsabilidad y respeto hacia el prójimo.

También le comentó que al llegar a la iglesia buscando esta bendición, los padres reconocen que su hija ha llegado a la edad de la razón, ya que es y será capaz de tomar más responsabilidad. Ellos ven la misa de los quince años como una manera de darle gracias a Dios por la bendición de la vida de su hija; buscan la bendición del Señor y su orientación para ella al comenzar esta etapa como adulta. Dijo que la participación de sus familiares que unen sus oraciones por ella, tal como era en esa ocasión en que se vio acompañada de todos ellos durante el solemne acto.

Por último agregó que la Virgen María es un modelo para la mujer, en todo nivel social y en cada edad. La decisión de una jovencita de celebrar sus 15 años en la Iglesia le ofrece muchas posibilidades, tanto a ella como a la parroquia. La exhortó a recibir con comprensión y con buena voluntad de atender sus necesidades, la celebración de la quinceañera para tener una oportunidad de enseñanza para la parroquia.

Posteriormente fue felicitada por familiares y amistades, entre ellos su hermana Natalia Valdez Rodríguez.