Una hermosa niña que fue bautiza en la Fe. Que el Señor limpie de todo lo que te rompa el corazón, que brille para siempre dentro de tu corazón la semilla de la Fe… La tierna bebé Alessandra Cepeda Ibarra, fue acercada a la pila bautismal para recibir el santo bautismo.
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La pequeña es una gran alegría e hija única para los señores Alejandro Cepeda Gaucín y Faviola Ibarra Piña, así que ante ellos fue proclamada nueva cristiana y recibió durante significativa ceremonia religiosa su primer sacramento católico.
La santa misa se llevó a cabo en el Templo de Nuestra Señora de Santa Ana y la Sagrada Familia, hasta donde se dieron cita desde muy temprana hora, los señores, Daniel Cepeda Gaucín y Magdalena Gaucín Morales, quienes fungieron como padrinos y escucharon atentos las palabras del sacerdote Fernando Rodríguez Castañeda.
En su momento los atentos padrinos acercaron a la niña a la pila bautismal, donde el sacerdote Rodríguez Castañeda, derramó el baño con agua bendita en la cabecita de la tierna Alessandra, proclamándola nueva integrante de la familia católica.
Durante la misa el presbítero Fernando, les recordó a papás y padrinos los preceptos del sacramento bautismal, por medio del cual expresó: “Vamos hacer otro signo blanco, deben conservarse limpios y puros, es su nueva dignidad, para que la conserven sin mancha, reciban la Luz de Cristo, a ustedes se les confían estos hijos de Luz”, recalcó.
El significado del nombre que ese día se le dio a la dulce niña, Alessandra, es un nombre propio femenino de origen griego, que significa defensora de la humanidad. Es la forma italiana del nombre Alejandra y la forma femenina del nombre Alessandro y Alejandro.
Luego de la santa misa, se llevó a cabo una comida familiar y con amigos, en una Quinta campestre, donde la familia anfitriona, ofreció en honor a su hija, esta bonita celebración, en la que se hicieron acompañar de sus seres más preciados, los cuales disfrutaron de muchas sorpresas bellas.
Además a hora oportuna se hizo servir el delicioso platillo, así como botanitas y refrescantes bebidas de sabores, sin faltar la deliciosa rebanada de pastel, como un riquísimo postre para los amables asistente.
Entre los presentes estuvieron celebrando junto a la pequeñita sus abuelos, tíos, primos y demás seres allegados a la familia anfitriona, los cuales se la pasaron llenando de tiernos apapachos y abrazos a la hermosa Alessandra, además de llevarle lindos regalos.
Sin duda fue un día lleno de bendiciones y felicitaciones para los Cepeda-Ibarra, que conservarán en su memoria por muchos años más. Enhorabuena por el bautismo de la dulce nena.
