El matrimonio no es una estación de destino, sino un camino que debe seguir y que juntos construyan toda una vida de amor… la pareja conformada por Mariana Patricia Barraza Villarreal y Juan Pablo González Santa Cruz, decidieron dar un paso importante en sus vidas y se unieron en feliz matrimonio, motivo por el cual festejaron con una emotiva boda en la imponente Catedral Basílica Menor de Durango.

A dicho recinto se dieron cita, familiares y amigos cercanos a los novios, para celebrar en grande ese día tan importante, así como sus queridos padres, señores Arturo Barraza y Patricia Villarreal Solís, padres de la novia; en cambio el feliz contrayentes estuvo acompañado por los señores, Pablo Gerardo González Güereca y Carolina Santa Cruz Bradley, quienes lo felicitaron de todo corazón.

Participaron ese día en el cortejo nupcial, los señores Leonel Arturo Pérez Santa Cruz y Claudia Hernández, como padrinos de anillos; en cambio Alejandro Márquez Aguilar y Gabriela Villarreal Romo, fungieron como padrinos de arras; además Francisco Martín Villarreal Solís y Claudia Valles Loera, figuraron como padrinos de mancuerna; asimismo los señores Arturo Enrique Barraza Villarreal y Patricia Villarreal Solís, fungieron como padrinos de velación; y de cojín fueron padrinos: Javier González López Portillo y Deyanira Villarreal Solís.

Al culminar la emotiva ceremonia eclesiástica los invitados se dirigieron al salón de Eventos “La Cantera”, en donde se llevó a cabo la elegante recepción, desde luego cuidando las medidas sanitarias que permiten nuestras autoridades de salud.

Primeramente Mariana y Juan Pablo, tomados de la mano bailaron su primer vals ante sus invitados, como marido y mujer, para luego continuar el tradicional vals con sus padres, donde todos los presentes se emocionaron y ovacionaron a la feliz pareja porque por fin pudieron lograr este sueño, unirse en matrimonio para toda una vida.

Los invitados llenaron de felicitaciones y buenos deseos a los novios, y pasaron junto a ellos una maravillosa velada, en la cual degustaron una deliciosa cena, bebidas preparadas y las delicias de la mesa de confitería.

Entre los presentes estuvieron personas de diferentes ciudades, como lo fue de: El Paso, Tx, Chicago, Anaheim California, Los Ángeles, Monterrey Nuevo León, Perú, Ciudad de México y Guadalajara.

Esperamos que todos los años que compartan estén llenos de alegría y amor. ¡Muchas felicidades!