Hasta la pila bautismal de la Catedral Basílica Menor de Durango fue acercado el pequeño Guillermo Nava Mendía para recibir el primero de los sacramentos que otorga la iglesia católica en presencia de familiares y amistades que se dieron cita para acompañarlo.
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Para ese emotivo instante el pequeño Guillermo lució un bonito ropón en el característico color blanco y estuvo acompañado de sus orgullosos padres los señores Guillermo Nava Vila y Paola Mendía Pacheco, además de sus padrinos Tania Mendía Pacheco, Juan Carlos Guillén Godínez y Juan José Nava Vila, quienes se comprometieron ante el sacerdote oficiante para encargarse de encaminar en la fe católica al pequeño a lo largo de su vida.
En la ceremonia también estuvieron presentes los abuelos del pequeño Guillermo, los señores María Esther Pacheco Salas, Jorge Ramón Mendía Bulnes, Encarnación Vila Lorente y Juan José Nava Stenner, quienes unieron sus oraciones para pedirle al Altísimo que los continúe llenando de bendiciones y más a este nuevo integrante de la familia.
En la celebración el sacerdote les comentó que el sacramento del bautismo abre la puerta a una nueva vida en Jesucristo ... una vida que va más allá de nuestra muerte y en la vida del cielo después de nuestra muerte.
Agregó que el bautismo es el sacramento de la salvación: un encuentro con Dios que nos limpia del pecado y nos hace verdaderos hijos de Dios, compartiendo su propia vida divina. Este gran regalo se ofrece a todos los que creen y a los hijos de familias de fe. Desde sus primeros días, la Iglesia ha bautizado a adultos y niños porque es la única forma ordinaria en que Dios ha revelado que podemos recibir la gracia de la salvación a través de esta participación en la muerte y resurrección de Jesucristo, como San Pablo enseña en Romanos capítulo 6: “Por lo tanto, fuimos sepultados con él por el bautismo en la muerte, de modo que cuando Cristo resucitó de la muerte por la gloria del Padre, nosotros también podríamos caminar en una nueva vida ... si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él ... Entonces también deben considerarse muertos al pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús”.
Finalmente les comentó que el bautismo es el primero de los tres Sacramentos de Iniciación. Los otros dos son la Confirmación y la Sagrada Comunión (Eucaristía). Los niños generalmente reciben los otros Sacramentos de Iniciación después de alcanzar los 7 años y antes de los 16.
Posteriormente procedió a bañar con las aguas benditas del Río Jordán al pequeño Guillermo, para finalmente despedirlos en medio de un sonoro aplauso, posteriormente se reunieron en conocido salón de eventos sociales en donde disfrutaron de una espléndida recepción, en donde los padrinos repartieron bonitos bolos a manera de recordatorios.