Luego de conocerse por medio de una amiga y mantener un bonito noviazgo durante cuatro años, llegó la inesperada propuesta de matrimonio donde contrajeron nupcias primero por el civil, para después de unos meses unir sus vidas mediante una emotiva boda religiosa, la pareja de enamorados formada por Alejandra Janeth Ibáñez Flores y Juan Alberto Guerrero González, quienes teniendo como testigos a sus seres más allegados, se unieron ante los ojos de Dios, en un enlace muy emotivo en el Templo de San Agustín.
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Los novios son herederos de los señores, Jorge Ibáñez Ascencio y Sara Guadalupe Flores Rocha (+, de feliz memoria), padres de la novia; asimismo presente estuvo la madre del feliz contrayente, señora Sandra González Tamayo, así como su hermano: Erick Guerrero González, quienes pidieron en silencio por la felicidad de sus queridos, Alejandra y Alberto.
El cortejo nupcial de ese día estuvo integrado por los padrinos de arras, señores Carlos Rodríguez y Rosario Flores Rocha, además participaron como padrinos de anillos: Manuel López Torres y Saraí Flores Díaz, asimismo como padrinos de lazo, fungieron Gerardo Flores Haro y Chryseel Terrones Mares, además como padrinos de velación participaron, Ramón Ibáñez Ascencio y Beatriz Hernández Alvarado.
Asimismo fungieron como padrinos de Biblia y Rosario, Roberto Alba y Mayela Tovar, en cambio como padrinos de Ofrenda, Alejandro Oliva y Deniss Huerta.
Posteriormente se ofreció una bonita recepción, a donde los asistentes llegaron muy puntuales y luciendo formal, evento que tuvo lugar en un salón camino conocido a El Pueblito, Durango.
Además ese día tan especial para los felices novios, estuvieron presentes familiares y amigos cercanos, quienes los felicitaron y desearon lo mejor en su nueva vida, ahora con el status de esposos.
El lugar lució muy lindo con aromáticas flores, las cuales sirvieron para recibir a la feliz pareja y a sus invitados, tras la emotiva ceremonia, y ahí todos los asistentes fueron partícipes de una magnífica fiesta en la que se ofreció una exquisita cena, bebidas preparadas para la ocasión, así como deliciosos postres, además de un excelente ambiente para invitar a bailar a los presentes.
Un momento único fue cuando los felices esposos bailaron el romántico vals, este fue el tema: “We Belong together” de Ritchie Valens.
Familiares y amigos expresaron a Alejandra y Juan Alberto, sus felicitaciones y deseos para que tengan un matrimonio lleno de amor y muy duradero.
Al evento llegaron familiares que vinieron exprofeso de: Cd de México, Querétaro y San Juan del Río, entre muchos invitados más de esta ciudad duranguense. Muchas felicidades al nuevo matrimonio por dar este paso tan importante.
