La pareja conformada por la guapa Lisette Díaz Rivera y Juan Antonio Burciaga Flores, decidieron dar un paso importante en sus vidas y se unieron en feliz matrimonio, motivo por el cual festejaron con una encantadora boda en la imponente Catedral Basílica Menor de Durango.
A dicho recinto se dieron cita, familiares y amigos cercanos de los novios para celebrar en grande ese día tan importante, así como sus queridos padres, señores Leonardo Díaz y María Luisa Rivera, asimismo los señores Gerardo Burciaga y María de Jesús Flores Vázquez, respectivamente.
Participaron ese día como pajecitos, los niños: Leonardo Díaz, Kinuel Díaz, Rodrigo Díaz y Fernando Díaz, quienes acompañaron a los novios en todo momento hasta para tomarse las fotos del recuerdo en el Centro de Convenciones Bicentenario, desde luego acompañado de sus respectivos padres.
Familiares y amigos cercanos a los novios participaron en el cortejo nupcial como padrinos de velación, quienes llevaron las velas, en cambio otros familiares más, llevaron las arras, la mancuerna y los aros de oro, para el bendito acto.
Al culminar la emotiva ceremonia eclesiástica los invitados se dirigieron a celebrar la elegante recepción la cual tuvo lugar en un salón de eventos sociales, donde se llevó a cabo la extraordinaria fiesta.
Ahí primeramente Juan Antonio y Lisette, tomados de la mano bailaron su primer vals ante la sociedad, como marido y mujer, este fue un tema muy emotivo para los novios y para los asistentes, para luego continuar el tradicional vals con sus queridos padres y demás familiares y amigos.
Los invitados llenaron de felicitaciones y buenos deseos a los novios, y pasaron junto a ellos una maravillosa velada, en la cual degustaron una deliciosa comida y de las exquisiteces de la mesa de confitería.
Ese día de fiesta, los asistentes felicitaron cariñosamente a los nuevos esposos y les desearon una vida plena de dicha y amor, la cual compartirán por muchos años más. Enhorabuena y felicidades.