La temporada invernal ya se siente, los cambios bruscos del clima pueden llegar a afectar directamente nuestra salud, después de la temporada calurosa, entran los frentes fríos que pueden vulnerar el sistema inmunológico de algunas personas y provocar enfermedades de las vías respiratorias.
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Tal es el caso de la tos, un síntoma que comparte varias enfermedades de las vías respiratorias. Por ello, para disminuir sus molestias, puedes complementar tu tratamiento médico con algunas alternativas más naturales.
Sabías que la tos puede ser útil
La tos es un mecanismo de defensa del cuerpo para mantener las vías respiratorias libres de agentes externos. La acción de toser puede desencadenarse gracias a estímulos mecánicos, inflamatorios, térmicos o químicos. Algunos de éstos son el polvo, las flemas, el humo e incluso partículas de comida.
Por otro lado, aunque la tos, pese a no ser muy grave en la mayoría de los casos, es bastante molesta. Esta ocurre porque las terminaciones nerviosas de las vías respiratorias que se encuentran entre la garganta y los pulmones se irritan por diferentes motivos: polvo, bacterias, virus entre otros.
Sin embargo, si la tos se vuelve cada vez más fuerte debes consultar a tu médico especialista para que te administre el tratamiento adecuado a tu padecimiento. Por ello los remedios que te compartimos solo son un auxiliares para combatir la tos seca o con flemas, en ningún momento deben sustituir en los tratamientos recetados por los especialistas.
Miel
La miel es un remedio tradicional por excelencia para el dolor de garganta. Según un estudio científico de la Universidad de Chicago, esta también puede aliviar la tos de forma eficaz así como la irritación que se presenta en la garganta.
Jengibre
El jengibre es una raíz muy poderosa ya que es antibacteriano, antiviral, antitusígeno y expectorante. Cuando lo consumimos para tratar la tos también ayudamos al estómago, porque su ingesta favorece la digestión, reduce la inflamación estomacal y los gases.
Vapor de agua
La tos húmeda, una de las que produce mucosa o flemas, podría mejorar con el vapor de agua, al tomar un baño de agua caliente debes dejar que el baño se llene de vapor y tendrás que quedarte dentro durante unos minutos hasta que los síntomas mejoren.
También se recomienda beber un vaso de agua después para refrescarse y evitar la deshidratación.
Menta
Las hojas de menta son bien conocidas por sus propiedades curativas. El mentol en la menta puede ayudar a calmar la garganta y puede hacer que parezca más fácil respirar. Puedes emplearlas en un delicioso y calientito té.
Ajo y agua con sal
Hacer gárgaras con agua salada y ajo podría ayudar a combatir el dolor de garganta. Tritura de cinco a seis dientes en agua caliente con sal y realiza gárgaras un par de veces al día durante dos o tres días seguidos.
Beber líquidos
Beber líquidos puede ayudar a aliviar la sequedad de tu garganta, una causa común de la tos. También ayuda a diluir el moco, lo que puede aliviar la tos y congestión.
Gárgaras de agua con sal
Este remedio simple es uno de los más efectivos para tratar el dolor de garganta y la tos húmeda. El agua con sal reduce las flemas y la mucosa en la parte posterior de la garganta, lo que a su vez puede ayudar a disminuir la necesidad de toser.
Cúrcuma
La cúrcuma se ha utilizado tradicionalmente para muchas enfermedades a lo largo de los años, incluida la tos. Su compuesto activo, la curcumina, tiene propiedades antiinflamatorias potentes ideales para calmar la tos ya seca con flema o húmeda.
Si la tos afecta tu capacidad para respirar debes de acudir de inmediato a tu centro médico más cercano o con tu especialista.