Hasta un 80 por ciento en perdidas tendrán los restaurantes de la ciudad, tras la decisión de implementar la Ley Seca durante todo el fin de semana, informó la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Adriana Porras Zubiría, quien aseguró que esto solo provoca que la crisis del sector se agrave.
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“Todos los aumentos que ha habido, la carga laboral e impositiva que se deriva de eso, nos afecta muchísimo”, dijo al reiterar que no se trata de que sean solo dos días en los que se deje de vender, como lo señaló el presidente de la Comisión de Actividades Económicas, Humberto Santana, sino que es durante el fin de semana es cuando los restaurantes logran obtener los recursos suficientes para el pago de la nómina de toda la semana.
En esta ocasión consideró aún más desafortunada la decisión del Ayuntamiento capitalino, ya que este fin de semana coincidía con finales de futbol internacional que suelen atraer a muchos aficionados a los restaurantes y consumir alcohol, aunado a que es quincena, “nosotros ya contamos en el calendario con las ventas de esos días para poder sostener esos gastos de operación”, comentó.
Pese a las declaraciones del alcalde Toño Ochoa Rodríguez, y de los regidores sobre que no habrá marcha atrás a la decisión, los restauranteros insistirán con las autoridades municipales y confían en que esta sea revertida incluso de último minuto.
“El objetivo de inhibir el consumo de alcohol, no se logra porque sabemos que hay ventas previas y la gente va a tomar en su casa, en la vía pública y eso es un riesgo mayor, al que se encuentren en los restaurantes conviviendo en un ambiente familiar”, aseguró la empresaria duranguense.