Tras 15 años de estar alejada de los escenarios de Durango, Iliana Donatlán regresa a su tierra y lo hace por la puerta grande, cobijada con un proyecto encabezado por el productor tres veces nominado al premio Óscar, James Schamus, a quien luego de tres años de insistencia, por fin Netflix aceptó producir Somos., la nueva serie que apunta para ser un éxito en la plataforma de streaming.
Grabada en el municipio de Canatlán, donde se recreó Allende, un pueblo de Coahuila, del que Somos. toma la historia tras una masacre ocurrida en el año 2011, en este lugar ubicado a 60 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, y de la que nadie sabía, sino hasta tres años después cuando el tema se volvió mediático gracias a la publicación de un trabajo periodístico.
En esta ocasión, la duranguense interpreta a Irene, una joven trabajadora de un Call Center que a través de las llamadas comienza a sospechar que algo va a suceder en el pueblo sin sospechar la magnitud de los acontecimientos que están a punto de pasar en el pueblo.
De esta manera Irene, se convierte en una de tantas personas que fue víctima de este hecho y cuya historia se centra en la investigación realizada por Ginger Thompson, misma que ganó el Premio Pulitzer.
Se podría decir que la llegada de Irene a la vida de Iliana sucedió de una manera fortuita, pues uno de sus amigos que también había adicionado, le avisó de un casting que se realizaba para una serie que se grabaría en el norte, sin embargo aunque parecía que la oportunidad se diluía, el talento y la insistencia de ella, además del de hecho de ser de Durango, la llevaron a formar parte de esta aventura.
Aún recuerda el momento en el que le dieron la noticia de que formaría parte del elenco de Somos. “brinqué de felicidad”, cuenta desde la Ciudad de México, lugar en el que vive desde que decidió que la actuación sería su profesión y su forma de vida.
Platica que la producción buscó a actores oriundos del norte, por eso en el reparto hay personas de Chihuahua, Torreón, Zacatecas y representando a Durango, Iliana Donatlán, quien feliz narra cómo se reencontró con su estado natal gracias a su amor por la actuación.
“Fue un orgullo trabajar con tanto paisano y amigos míos que hacen mucho teatro en Durango y que pudieron estar también en la serie”.
EL NARCOTRÁFICO Y LA TELEVISIÓN
Si bien es cierto, las series cuyo tema central es el narcotráfico, se volvieron muy populares desde hace algunos años, también es una realidad que el telespectador comienza a cansarse de este tipo de contenidos y a buscar otras historias.
Sin embargo, la narrativa de Somos. lleva al público a conocer la historia de las víctimas y no a la idealización de los victimarios; a conocer qué pasó con quienes estuvieron ahí y cómo lo vivieron; para con esto provocar una empatía hacia ellos, principalmente entre quienes viven en el norte de México, “a veces es tan cercano, que toca a tu primo o a tu amigo y empiezas a ser consciente de que esto sucede”.
Iliana recuerda aquella vez en la que mientras pasaba por el bulevar Felipe Pescador, uno de los más transitados de la ciudad de Durango, se enteró que minutos antes había sucedido una balacera en el lugar y en ese momento solo pensó, “qué bueno que pasé 10 minutos después. Normalizas la situación y eso no puede suceder porque entonces lo estamos aceptando”, dice.
Por eso, el propósito de su trabajo en Somos. es justamente sensibilizar a las personas, que no solo conozcan la historia, sino que comprendan el sufrimiento que viven quienes se quedaron y con esto tener la valentía de exigir a las autoridades que paren masacres como estas y que hoy suceden en cualquier parte del país.
“Somos. es una pequeña historia de tantas de horror en México y esta esto es una manera de levantar la voz”.
EL REENCUENTRO CON SU TIERRA
Como un regalo del cielo califica Iliana, llegar y trabajar en Durango, pues al hacerlo con el acompañamiento de Somos. significó una gran oportunidad para ella, “creo que fue un regalo de la vida”, y al verse llegar como la actriz de esta producción la hizo sentir orgullosa de todo el camino recorrido en estos 15 años.
La satisfacción de ver a su familia en el set de grabación, viéndola cumplir su sueño fue la mejor experiencia para ella y para los suyos.
Además de que ser de Durango sin duda le dio un plus, pues era la que hacía las recomendaciones en materia gastronómica y turística, “de las cosas que siempre me enorgullecen es nuestro cielo hermoso”, de ahí que esta fue nombrada desde hace muchos años como la tierra del cine.
Por último reconoce que para llegar a un lugar importante dentro de un mundo como el de la actuación es importante tener las agallas para salirte de la zona de confort que te da el lugar de donde eres. A ella le tocó dejar todo, amigos, familia, mascota, y lo hizo en esa búsqueda por realizar su sueño. “Si tu aspiras a más tienes que moverte”.