Luego de las dificultades que planteó el temporal la semana pasada como parte de la conjugación meteorológica de un frente frío y una tormenta invernal, con daños severos a la infraestructura educativa, además de la suspensión de clases en 300 planteles educativos que impactó a algunos 5 mil estudiantes, el paso siguiente es la evaluación de los daños para comenzar a rehabilitar las escuelas.
Así lo declaró el Secretario de Educación, Rubén Calderón, quien sobre el tema, indicó que primeros datos indican que al menos son 16 las instituciones educativas que resultaron afectadas por las avenidas y las fuertas lluvias, en municipios como Tepehuanes y Tamazula, principalmente.
Indicó que el trabajo actual es precisamente de revisión física de las escuelas, con el fin de tener un panorama claro de la problemática y enseguida buscar los recursos del FONDEN, hacer la gestión correspondiente y proceder a resolver la circunstancia que priva en la región, luego del meteoro de la semana anterior, que impacto a siete municipios del noroeste de Durango.
Reconoció que consecuentemente la situación se presentó crítica para la población estudiantil, así como para los trabajadores de la educación, sin embargo, se realizan ya las labores respectivas para superar la problemática y salir adelante.
Reiteró que en efecto, existen daños severos en la infraestructura física de los planteles educativos, caída de bardas, desprendimiento de techos, inundación de aulas, empero, esta misma semana deberá haber una evaluación completa de los daños para proceder de inmediato a la gestión de recursos.