La reciente ola de calor en la que se registraron temperaturas de hasta 41 grados centígrados provocó que se presentara la muerte 18 mil cabezas de ganado en el estado de Durango, cifra muy inferior a la de 2021 cuando se registró la muerte de 70 mil cabezas, declaró el presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (URD), Rogelio Soto Ochoa.
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Además destacó que ya se arrastraba un estiaje que estaba afectando la actividad ganadera de la entidad.
"Afortunadamente las lluvias han dejado a tras la ola de calor que se presentó por espacio de cuatro semanas de calor intenso que cobro la vida de algunos animales, principalmente animales enfermos o viejos, sin que se descarte la muerte de becerros", dijo.
Soto Ochoa confía en que las lluvias seguirán presentándose en lo que resta del mes de julio, y aunque no llueve forraje, las precipitaciones pluviales siempre son vitales para la actividad agropecuaria y para todo.
Precisó que a pesar de que la ola de calor fue intensa, máxime que aquí no se habían registrado temperaturas por encima de los 40 grados centígrados, la afectación a la actividad ganadera fue de apenas el 1.5 por ciento del total del hato ganadero de la entidad, es decir 18 mil cabezas.
