El 20 por ciento de los habitantes de la cabecera municipal de Cuencamé no cuentan con agua suficiente para consumo humano, informó la alcaldesa Elizabeth Sotelo Ochoa, quien señaló que de las 15 mil personas que habitan en esta zona, cerca de tres mil están en una situación crítica en la que el Gobierno municipal ha intentado apoyar a través de pipas que llevan un rol con el que se abastece a cada familia por lo menos cada tercer día.
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Ante esta situación, la directora de la Comisión de Agua del Estado de Durango (CAED), Yadira Narváez Salas, informó que esto se deriva del lugar en el que se encuentra asentado el municipio, lo que se observa principalmente en los aforos que pueden dar los pozos existentes y que han sido perforados a profundidades de entre 200 y 300 metros de donde solo se obtienen máximo cinco litros de agua.
“Esto es insuficiente y el agua muchas veces no es de la mejor calidad”, comentó la funcionaria estatal, quien reconoció que a pesar de no ser una situación considerada como grave, el estrato geológico en el que se asienta es muy difícil para encontrar agua.
Informó que desafortunadamente el agua de los pozos que han sido perforados recientemente no ha tenido buenos resultados y han sido clasificados como fallidos, por lo que están trabajando para encontrar alternativas de espacios geológicos que estén cercanos, aunque se deba construir líneas de conducción de entre 10 y 15 kilómetros, todo ello con el propósito de garantizar una cobertura total.
“La situación no es crítica, pero sí necesitamos encontrar una fuente de abastecimiento que le dé la garantía de una segunda fuente de abastecimiento”, comen
tó Narváez Salas, al reiterar que anualmente se trabaja en la realización de proyectos ejecutivos, sin embargo éste quedará listo para ser integrado a partir del 2025, esto con el propósito de garantizar recursos de cobertura y abastecimiento de agua.
Reiteró que la falta de agua potable se focaliza solo en la parte de la cabecera municipal y algunas comunidades aledañas, pues la parte que se encuentra próxima a la sierra no tiene una problemática.
La titular de la CAED, reconoció que además de Cuencamé, otro municipio que está en una situación similar a esta es Tlaualilo, esto debido a la zona en la que se encuentran asentados y donde la falta de lluvias ha generado estragos no solo para la agricultura y ganadería, sino también para la conservación de los mantos freáticos de la zona, que finalmente sirven para mantener vivos los pozos de agua utilizada en el consumo humano.
