¿Te gustaría tener el recuerdo de un ser amado que pasó a mejor vida? La diseñadora duranguense Alma Ponce lo hace realidad con su proyecto "Apapachos", el cual surgió a raíz de la pandemia y desde su creación ha conquistado los corazones de miles de familias alrededor del país.
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"La pandemia me obligó a emprender, comenzaron los despidos y entonces me dediqué a estar con mis hijas pero tenía que tener un ingreso, así que decidí empezar con este proyecto", agrega que su principal enfoque es elaborar ositos con ropa de personas fallecidas, sin embargo también los hace como recuerdos para bautizos o cumpleaños "o con ropita de niños que ya crecieron y les hago un osito con su ropa chiquita", dice con una sonrisa en su rostro.
Aria, su primera musa
La joven egresó de la licenciatura en diseño de modas en el año 2011, posteriormente comenzó a trabajar en proyectos de elaboración de uniformes hasta que contrajo matrimonio y tuvo a su primogénita: Aria, quien se convirtió en su principal musa. "Empecé a elaborarle su ropita y poco a poco me animé a hacer ropa para niños y ofrecerla a través de Facebook, tuve bastante éxito y de ahí comencé a elaborar disfraces, incluso hasta el día de hoy los sigo haciendo".
Así fue que nació su marca de ropa "Aria baby&kids", en la cual se permite experimentar con las telas y los diseños para los pequeños del hogar, pero siempre teniendo a sus dos hijas como mayor inspiración. "Me parece que la ropa para los niños es más divertida, bonita y tierna, como diseñadora me gusta realizar creaciones que se que también le pueden servir a mis pequeñas".
Poco a poco su marca se consolidó en el mercado duranguense, sin embargo con la llegada de su segunda hija decidió disfrutar su maternidad y ponerlo un tiempo en pausa. Actualmente "Aria baby&kids" continúa pero ahora los diseños son sobre pedido.
Un apapacho al corazón
"Recuerdo que el primer oso que elaboré fue con una tela muy bonita que tenía en mi casa, lo hice como una prueba, pero me gustó mucho así que se lo mostré a mi familia y quedaron encantados, y de hecho mi primer cliente fue mi abuelito, lo cual me motivó mucho", relata con alegría.
Por recomendación de boca en boca "Apapachos" fue creciendo, pero sin duda fue la pandemia por la Covid-19 lo que hizo que sus ositos llegaran a más personas. El poder conservar una parte de aquellas madres, padres, hijos, hermanos o abuelos que fallecieron sin duda conquistó los corazones de los duranguenses.
"Me gusta ver la reacción de mis clientes, ahora con el cubrebocas solo nos vemos los ojos y me percato cuando se emocionan y se les llenan de lagrimas. Y esa es mi emoción de siempre, la alegría verlos recibir el peluche".
A sus osos, Alma les cose un mensaje predeterminado pero sus clientes también lo pueden personalizar a su gusto. Este se coloca sobre una tela blanca en uno de los pies del peluche.
Alma cuenta con dos tamaños, el más popular es el que mide 60 centímetros de largo ya que este permite que la tela luzca más y otro de 45 centímetros. Para su creación solicita una prenda que sea talla mediana en adelante, con mangas, ya que de ahí también realiza partes del oso.
Las prendas deben ser entregadas limpias y de preferencia planchadas, aunque estos también llevan forro al interior para que queden firmes. Además se pueden combinar múltiples prendas e incluso le crea su propia ropa al osito, todo al gusto del cliente.
Alma tarda de cinco a siete días hábiles en realizar los osos, dependiendo de la cantidad y detalles que se le soliciten. Si te interesa conocer más acerca del proyecto puedes contactarla a través de su WhatsApp 6182698211, también en su cuenta de Instagram @apapachos_ositos y en Facebook como Apapachos.
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