Largas filas se observaron el día de hoy en la sucursal del Banco Bienestar que se encuentra en el Centro Histórico de la ciudad, en su mayoría se trató de adultos mayores quienes acudieron para el cobro de la pensión entregada por el Gobierno federal, sin embargo en esta ocasión los beneficiarios esperaron bajo los intensos rayos del sol con una temperatura de hasta 35 grados centígrados, según la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Pese a que en otras ocasiones es la propia Secretaría del Bienestar quienes suelen colocar toldos y en ocasiones hasta sillas para la comodidad de los asistentes, en esta ocasión solo contaron con su propia sombrilla pues no hubo ninguna de las comodidades que les ofrecen en otras ocasiones.
Algunos de los beneficiaron quienes llegaron desde las primeras horas del día para formarse en la fila y ser de los primeros en acceder al cajero, se mostraron molestos ante la situación, pues comentaron entre ellos que no estaba en funcionamiento, esto pese a que la Secretaría del Bienes constantemente señala que ninguno se encuentra fuera de servicio y tiene un horario de atención de 24 horas para que la gente pueda acudir sin tener que exponerse a esta situación.
Cabe mencionar que en Durango existen 33 Bancos Bienestar repartidos en todo el territorio estatal, sin embargo en el caso de la capital se encuentran solo dos sucursales, ambas con las mismas condiciones de saturación durante la temporada de pago de pensiones de los diversos programas sociales que promueve el Gobierno federal, de ahí que se vuelve insuficiente el brindarles atención a todos los beneficiarios de manera pronta y con calidad en el servicio.
De igual forma existen otras opciones para realizar el cobro del apoyo económico federal, pues existen algunos adultos mayores y jóvenes quienes deciden recurrir a los cajeros automáticos de otras instituciones bancarias y pagar la cuota que se les cobra "prefiero hacerlo antes que irme a formar horas bajo el sol o el frío en el Blanco Bienestar", comentó Selene Juárez, encargada de cobrar la pensión de su mamá y abuelo, quién está cerca de cumplir 90 años.