En la plataforma de Facebook “Rumbo al 400 Turismo y Cultura” se encuentra un video que narra la carta y a su vez muestra la belleza del municipio.
Para celebrar el IV centenario de la fundación del municipio de Canatlán el historiador Óscar Luna escribió una carta a dicho municipio, donde narra desde su fundación hasta lo que se ha convertido hoy en día.
La Carta a Canatlan es un proyecto por iniciativa del investigador, en conjunto con la presidencia municipal, a través de Daniel Iván Soto Quiñones, director municipal de dirección turística en Canatlán. Óscar con los conocimientos y habilidades que tienen en el campo histórico y de investigación, realizó una carta dirigida a dicho municipio, donde se resaltaran los encantos naturales, patrimonio, historia, los acontecimientos más importantes por los que ha sido testigo dicha tierra, como ser el lugar que escondió al obispo Zubiria y Escalante del gobierno de Benito Juárez, o cuando los revolucionarios llegaron a él en 1919, así como también que fue el territorio donde vivió el cura Luis Batís, durante 26 años, quien después fue sacrificado por los federales en la guerra cristera y canonizado por Juan Pablo II en el año 2000.
La carta no olvida los bellos lugares turísticos que tiene este bello municipio, sus costumbres y tradiciones, su gente. No debe pasarse por alto la presencia del llamado Canatlán Viejo, sitio en donde reconocidos investigadores apuntan como el sitio donde estuvo inicialmente la hoy llamada ciudad de las manzanas y la registran como una población indígena en sus comienzos.
El Ingeniero Pastor Rouaix anota en su estudio Diccionario Geográfico, Histórico y Biográfico del Estado de Durango (1946), que la primera misión religiosa de la comarca que formó el municipio de Canatlán se estableció en La Sauceda. Poco tiempo después, por el año de 1585 las familias que se habían establecido en La Sauceda se cambiaron a una cañada inmediata, donde había una antigua ranchería indígena y allí fundaron el pueblo que se llamó Canatlán y hoy se denomina Canatlán Viejo.
De acuerdo a esta investigación, aproximadamente 150 años después, a mediados del Siglo XVIII y debido a que aquel lugar no prestaba suficientes comunidades, el pueblo se cambió a donde actualmente se levanta la cabecera municipal.
Por su parte, el entonces estudiante del Instituto Juárez, Agustín Ruiz Soto escribió en un ensayo titulado “Congreso Mexicano de la Historia, VIII Reunión, Durango Durango”, que tuvo lugar en el año de 1947, que “…Los jesuitas establecieron en La Sauceda una importante Misión, que poco a poco fue poblándose, pero en el año de 1585 se trasladaron a un poblado habitado por indios, que se encuentra situado tras el cerro hoy llamado de la Cruz, el lugar se denominaba Canatlán, que en lengua Nahuatl significa “ Lugar de Patos”,..” es decir, quien al paso del tiempo fue Senador de la República por el Estado de Durango se refiere al sitio conocido como Canatlán Viejo, una cañada que entrelaza agua y tierra, el Río La Sauceda y sembradíos ubicados sobre su ribera.
Dicho ensayo escrito en el año de 1947, trae datos interesantes del Canatlán de aquella época, mencionando a don José María Patoni como el constructor de la ya desaparecida Escuela Centenario. También dejó plasmado en su obra que en el año de 1914, la Iglesia que existía fue reconstruida totalmente por el Sr. Pbro. Luis Batis. Al hacerse las excavaciones para levantar la torre, se encontró un pergamino que atestiguaba que la Iglesia que se estaba reconstruyendo tenía cien años de fundada.”
El Sol de Durango, en su edición del día 14 de septiembre de 1977, es decir, hace ya 31 años, publica lo que titulo “Apuntes sobre la fundación de Canatlán”, proporcionados por don Luis Carbajal Aréchiga, que dice lo siguiente: “…Corría el año de 1160 cuando las tribus Quinames ó Quinmetín fundaron Canatlán, en la margen del Río La Sauceda, a espaldas del cerro de La Cruz. Estos aborígenes tenían vasto territorio, en donde en la actualidad se ha construido la escuela secundaria federal “Mariano Balleza”.
Más adelante, alrededor de 1580, un grupo de Franciscanos llegó hasta estas bondadosas tierras, empezando a colonizar ese lugar, que al paso del tiempo, por el año de 1616, llegaron a convertirse en la población de Canatlán.
Los Franciscanos, estudiosos de la naturaleza, decidieron llevar adelante ese proyecto y plantaron en La Sauceda algunas variedades de manzana (California, Blanca y Roja y membrillo, perón, pera, beramota, vides, nogales y otros.
La rica tierra y el empeño y dedicación puestos por estos colonizadores de Canatlán arrojó como resultado de este experimento, que cuatro de las especies plantadas tuvieran éxito.
Del resultado positivo obtenido con este experimento, los Franciscanos decidieron plantar la primera huerta en forma, en el año de 1815, en un paraje denominado “Santa Cruz de las Huertas”.
400 años de experiencias y anécdotas son redactados en esta carta, con el asesoramiento de historiadores de Durango, planteó Óscar Luna, quien resaltó que estas investigaciones dan identidad a los habitantes y es un atractivo para los visitantes, ya que dicho escrito se distribuye en video por diversas plataformas y se encuentra en otro idioma (Ingles).
Por su parte el director municipal de Promoción Turística señaló “En Canatlán estamos de fiesta, celebrando nuestras raíces y antepasados que dieron vida a este hermoso municipio de gente trabajadora”, añadió que este año el festejo de la Fundación de Canatlán, se lleva a acabo de forma distinta, debido la situación de la pandemia, solo se realizarán actos simbólicos, como la promoción de sus parajes, monumentos y sitios emblemáticos.
A través de la página de Facebook de Turismo Municipal, “Rumbo al 400 Turismo y Cultura” se transmite una serie de videos con datos interesantes de la entidad, así como una Carta a San Diego de Alcalá, con motivo de la celebración de su fundación, la cual fue escrita por Óscar Luna.
Enumeró los diferentes lugares que han hecho del municipio un lugar atractivo para propios y visitantes, incluso, el municipio ha sido lugar para la filmación de películas y series recientemente; entre los parajes favoritos se encuentra la Presa Caboraca, las enormes formas rocosas y el famoso Hagüey de la localidad Ricardo Flores Magón, Hacienda La Sauceda y el Cerrito del Garbanzo, que se admira al entrar a la cabecera del municipio, destalló.
Como parte de los acontecimientos históricos, Daniel Soto mencionó que de acuerdo a los historiadores, la fundación se sitúa el 13 de noviembre, día de San Diego de Alcalá, porque como sabemos los frailes bautizaban a la misión que fundaban, con el nombre del santo que correspondía y le agregaron Canatlán, nombre mexicano que quiere decir “lugar de patos o de tules”, seguramente por la gran cantidad de lagunas que había entonces en el entorno.
Después de la revolución mexicana, se pasaron a fraccionar las grandes haciendas de la región y a establecer poblados que le dieron vida social y económica y la región. Durante el gobierno de Plutarco Elías Calles, se establecieron las escuelas granja J. Guadalupe Aguilera y el cuartel de caballería del Sauz Bendito que dieron renombre a la región.
Sin embargo, con las grandes plantaciones de manzana en el siglo XX, Canatlán adquirió lugar preponderante como centro frutícola del Estado.
Soto Quiñones y Óscar Luna invitaron a participar en este festejo de manera virtual, en la plataforma de Facebook “Rumbo al 400 Turismo y Cultura”, compartiendo anécdotas, fotos o cualquier comentario acerca de Canatlán.
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