La crisis económica que se vive, generada por la contingencia sanitaria, agudizaron la circunstancia para la industria de la construcción en Durango, de tal manera que durante el último año al menos cinco empresas constructoras han tenido que cerrar operaciones, con la pérdida de un millar de empleos, reveló en entrevista el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Raúl Montelongo.
Con la llegada de la pandemia, la crisis se agudizó y durante los últimos doce meses, en Durango al menos cinco empresas constructoras, algunas ya con una trayectoria importante, se vieron con la necesidad de cerrar sus puertas definitivamente.
"La dificultad que se vive impactó prácticamente a todo el gremio, al grado de que los que se han resistido al cierre, han tenido que vender algunos activos para poder subsistir, destaconado que son menos los que han tenido problemas" destacó.
