¿Qué pasaría si el mundo se quedara sin abejas? Esta misma pregunta se hizo Ruth Falomir hace dos años, una joven proveniente de una familia duranguense dedicada al trabajo en el campo y la ganadería, quien actualmente busca impulsar la preservación de las abejas en la entidad.
Desde pequeña siempre tuvo una especial fascinación por el campo, al pasar gran parte de su infancia en el rancho familiar Ruth se apasionó por el trabajo, pero a pesar de su gusto no estudió nada relacionado al trabajo en el campo y finalmente evocó sus estudios a negocios internacionales, sin embargo la vida tenía otros planes para ella.
Apicultura: vocación con sentido social
Una vez que la joven concluyó sus estudios y comenzó a ayudarle a su papá a manejar el rancho “El Sueño”, fundado en el año 2013, el cual es ganadero principalmente comenzó a adentrarse en el fascinante mundo de las abejas.
“Un año antes de graduarme mi papá decidió comprar varias colmenas, mi abuelo era agricultor en Canatlán y él tenía muchas colmenas porque tenía cultivo de manzanas, y por lo tanto tenía bastante experiencia con las abejas”, destaca Ruth.
Para este año su padre había comprado varias colmenas, pero de acuerdo con la joven estás estaban abandonadas, “mi papá me decía qué ellas se cuidaban solas pero en mí eso no hacía sentido”, señala sonriente, por lo que buscó la ayuda de su abuelita quien la orientó respecto a los cuidados y necesidades de las abejas.
Fue así que con la ayuda de su abuelita y la asesoría de un apicultor originario de la localidad de Campo Verde, Nuevo Ideal, Durango, poco a poco comenzó a darle forma a su apiario. A la par que se documentaba con libros, investigaciones y documentales. Señala qué al segundo día de que comenzó con la labor esta dejó de ser un trabajo y se convirtió en una pasión.
Desde que se encontraba en la universidad el enfoque de Ruth fue en el rubro social, “yo en la carrera hacía huertos urbanos en comunidades vulnerables, siempre mi tirada es ver cómo un negocio lo puedo voltear hacia ese emprendimiento que vaya más allá del lucro”, destaca.
Por ello cuando inició con el apiario empezó a conocer sobre el mercado de la miel en Durango y finalmente entendió que esta es poco valorada, así como el trabajo de las abejas y los apicultores. Fue así que decidió evocar su labor al sentido social al cuidar y reproducir más abejas y no explotarlas de ninguna manera.
Noca Mielería: educar a la gente sobre la importancia de las abejas
Con la idea en mente, Ruth empezó a darle forma a su proyecto en el que si bien iba a ser responsable del apiario en el rancho familiar, también quería que personas ajenas a este tuvieran la oportunidad de tener contacto directo con la abejas y aprendieran sobre la importancia de estas en el ambiente. De ahí nació Antera Mielería.
En enero de este año, el primer grupo ajeno a su familia y amigos que acudió al apiario fueron visitantes de Saltillo, “uno de mis amigos que organiza viajes a diferentes lugares me contactó y habló sobre este grupo, así que yo les recomendé varios lugares a visitar en Durango y entre ellos el apiario”.
Con Noca, Ruth busca que su negocio no se base en el lucro de las abejas si no en el impacto social que este genere, al acercar a las personas tengan acercamiento al apiario.
Además de dedicarse al cuidado y preservación de las abejas, la duranguense también emplea parte de su tiempo al rescate de colmenas que se ubican en la ciudad de Durango, en casas, oficinas, escuelas, entre otros lugares. En estos casos Ruth pide a la sociedad que no se llame a los bomberos “ya que solo les echan agua con jabón y las abejas se mueren, siempre es mejor que contacten a un apicultor porque ellos sabrán qué hacer. Como humanos tenemos la responsabilidad de cuidarlas de la mejor manera”, destaca.
La duranguense espera que cada vez más personas se acerquen al apiario para conocer a estos extraordinarios insectos y la maravilla que provocan en la naturaleza y finalmente se refleja en beneficio para los seres humanos.
Para las personas interesadas en visitar el apiario de Antera Mielería pueden contactar a Ruth a través de sus redes sociales o en el correo electrónico nocamieleria@gmail.com, para algún rescate de colmenas se también se le puede contactar en los medios mencionados.