La situación que actualmente atraviesan muchas constructoras en Durango es muy complicada por la falta de pago de parte del gobierno estatal, a decir del líder de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), se estima que por las 189 obras pendientes la deuda en lo general a empresarios del ramo supera los 600 millones de pesos y esperan a corto plazo un esquema que les inyecte recursos, ya que hay riesgo de colapso en varias de las empresas involucradas.
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Así lo señaló Raúl Montelongo Nevárez al reconocer el difícil panorama en que se encuentra este sector y aclaró que aún así, las obras pendientes de concluir no están detenidas, sino que continúan trabajando.
Añadió el informante que se está a la espera del anuncio de un esquema financiero por parte del gobierno estatal, el cual les brindará a ellos como sector la esperanza de poder acceder a recursos .
Cuestionado en torno a cuánto es lo que se les debe a constructores actualmente, Montelongo Nevárez detalló que empresas afiliadas al organismo que él representa son algo así como 30 millones de pesos, pero a constructores locales adeudan 300 millones y en total por todas las obras en el estado se dice que son más de 600 millones de pesos.
Al reiterar que las obras no están detenidas, aseveró que tanto en procesos administrativos como físicos continúan en marcha, esperando que a corto plazo se mes puedan hacer algunos pagos.
Detalló que en el caso de trabajos muy representativos como es el puente elevado Francisco Villa, existe un compromiso entre constructora y Secope para poder concluirlo a más tardar en diciembre, pues aún se requieren algunos trabajos periféricos para que pueda ser inaugurado en su totalidad.
El panorama que viven muchas empresas del sector es complicada, la falta de liquidez es grave y dependen mucho de que les paguen para seguir adelante; de ahí la insistencia ante las nuevas autoridades estatales para que se cubra el adeudo en corto plazo y no sean condenados a la quiebra.