El Centro Empresarial Coparmex Durango, demandó la intervención del gobernador del estado, José Aispuro Torres, así como de senadores, diputados federales y locales, para que intercedan ante el Gobierno federal a fin de implementar el “Programa regreso seguro” a partir del lunes 1 de junio.
Para ello el sector productivo se compromete a aplicar estrictamente una serie de lineamientos, acciones y logística en materia de conservación de la salud, implementarlos por etapas en las diversas áreas de los centros de trabajo, y de esta manera dar una solución viable, responsable y equilibrada ante el problema tanto sanitario como económico que se presenta.
Estas acciones incluyen la limpieza y desinfección de áreas de trabajo, aplicación de gel antibacterial en manos y desinfección en aerosol y atomizador en suelas del calzado a toda persona que ingrese en centros de trabajo, uso de cubrebocas, toma de temperatura con pistola infrarrojo a toda persona que ingrese al lugar de trabajo o área de servicio, en las empresas con más de 50 trabajadores entre otras acciones.
También respetar en todo momento una distancia mínima entre las personas de dos metros, y fomentar las reuniones virtuales y el trabajo desde casa.
En un comunicado la Coparmex señala que el sector productivo en Durango ha colaborado de manera decidida en acatar las indicaciones y estrategias dictadas por las autoridades correspondientes para tratar de detener y mitigar los contagios de este letal virus, además de buscar preservar dentro de sus posibilidades la planta laboral y los salarios a los trabajadores.
Sin embargo, como consecuencia de esto, y de la fuerte caída en los ingresos de las empresas, la supervivencia de miles de unidades económicas en el estado está gravemente amenazada, sin alguna expectativa de apoyo, empatía y flexibilidad de ningún tipo de autoridad.
Se señala que el prolongar el cierre temporal de los centros de trabajo más allá́ del 31 de mayo podría acarrear consecuencias igualmente graves, si no es que peores, como la quiebra masiva de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, escenario que podría derivar en un desempleo generalizado, el desabasto de bienes y servicios, el desbordamiento de la delincuencia, así́ como saqueos, actos vandálicos, violencia social, entre otros.