Lejos de perder fuerza con el paso de los años, enviar coronas hecha de flores es una tradición muy particular de celebrar el Dia de Muertos.
Pues es una forma de honrar y demostrar respeto hacia una persona o un ser querido que se ha adelantado en el camino.
Mis hijos “Mi motivación” para dar lo mejor de mí, palabras de una madre orgullosa que, gracias al apoyo de sus hijos la han impulsado a seguir dedicándose a lo que más le gusta, la realización; de la corona de muertos, pero;
¿De dónde surgió la idea de dedicarse a esta labor?
Mayela siempre fue una mujer trabajadora y llena de sueños, pero con el paso del tiempo se enamoro y formo una linda familia.
Tuvo dos hijos los cuales son su mayor tesoro, al poco tiempo después Mayela se convirtió en madre soltera.
A un no sabia los retos a los que se enfrentaría, pero como toda madre siguió sus instintos y el miedo que tenia se convirtió en fuerza para sacar adelante a sus hijos.
Fue una etapa difícil sentía que el mundo se le venía encima, era muy complicado encontrar trabajo y al mismo tiempo cuidar de sus hijos, pero aun así no se dio por vencida.
Pero la vida nos sorprendió con una pandemia que nadie veía venir y ella al igual que muchos mexicanos se vio afectada por este virus, ya que al ser una persona con comorbilidades tiene que quedarse en casa.
Durante este periodo de confinamiento inicio con la idea de vender donas, le iba muy bien pero no era suficiente. Así que decidió agregar algo más a la venta, unas deliciosas gorditas hechas a mano.
Mayela además de tener un rico sazón, tenia una gran habilidad con las manualidades, utilizando todo tipo de material.
Un día observando imágenes de coronas hechas de flores, le despertó la curiosidad de poder hacer una, guiándose paso por paso fue como logro crear su primera corona de flores.
Con la practica fue mejorando cada vez más, utilizando otros materiales como la seloceda, y lo que empezó como un hobbie y un regalo para sus difuntos se convirtió en una fuente de ingreso.
Poco a poco se fue dando a conocer gracias a su maravilloso trabajo pues cada pieza es única, hecha con cariño y dedicación cuidando cada detalle.
Ahora a sus 52 años de edad Mayela Cortez sigue con esta bonita tradición, y aunque el camino no ha sido nada fácil lleva dedicándose 15 años a esta labor siempre con mucho esfuerzo y amor.
A pesar de tener complicaciones con la vista y debido al que el encierro obligó a las personas a permanecer en el interior para detener la propagación de Covid-19 ha crecido la necesidad, pues como a muchos duranguenses le ha afectado en su economía.
Ante la pandemia Mayela de esta manera busca obtener ingresos extras, gracias a la venta de corona de muertos.
Tanto sacrificio y entrega valió la pena, pues sus dos hijos la han apoyado de muchas maneras.
En ocasiones le ayudan a realizar las coronas y por el otro lado, la apoyan utilizando las redes sociales para compartir por medio de fotografías su trabajo, con la finalidad de aumentar sus ventas.
Mayela Cortez como muchas madres solteras es un símbolo de fuerza y de admiración, hay mucho que aprender de todas esas mujeres con las que te encuentras a diario, pues detrás de ellas hay una historia y han demostrado que ante los desafíos se crece.
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