La generación de energía se ha vuelto más cara cuando viene de fuentes fósiles, y en México la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que es el principal productor de energía, basa mucho su generación en fuentes fósiles como el carbón, gas y todos los derivados del petróleo, y tampoco se han hecho las inversiones necesarias de infraestructura para aumentar la capacidad de transmisión en la red eléctrica mexicana.

Francisco Alanís, vicepresidente de la Comisión de Energía de la Confederación Patronal Mexicana (Coparmex) en Durango, detalló que al cierre de 2021, se dio un incremento total de 7.5% más, en el costo de electricidad en todas las diferentes tarifas, pero ese 7.5% ya se ha incrementado en lo que va de 2022, lo que afectado a todos, desde los pequeños empresarios, hasta los grandes industriales.

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Dijo que el incremento en las tarifas de energía eléctrica, es el resultado de que “los precios de los energéticos fósiles van mucho a la alza”, y sale ahora más caro, a pesar de que Pemex es el principal distribuidor.

El insumo de la electricidad, es de los principales componentes de la estructura de costos en las empresas, y “para no perder dinero”, se deben incrementar los precios de los productos y servicios, lo que le va a impactar directamente a los consumidores finales.

En cuanto al tema de los apagones en distintos puntos del país, señaló “la transmisión que tenemos ya está saturada, por lo tanto, ante algún pequeño problema o de mantenimiento, se saturan las líneas y se tiene que bajar el switch, eso ha pasado como en la península de Yucatán u otros lados, por esa falta de inversión”.

Para mejorar la transmisión eléctrica, recordó que hubo varias licitaciones que se “pararon” a partir de la administración actual, por eso la alternativa que se tiene, es entrar a temas de eficiencia energética, reducción de consumo inteligentemente, evitar consumo en ciertos horarios, y si se tiene la posibilidad, invertir en infraestructura, paneles solares y baterías.