Declarar a la gastronomía tradicional duranguense como patrimonio intangible del estado, más allá de las connotaciones culturales y de identidad que brinda a la sociedad, significará un detonante de la economía y el turismo, por lo que conlleva una gran responsabilidad para mejorar constantemente servicio y atención por parte del sector restaurantero, señaló Miguel Camacho Herrera.
Así lo estableció el dirigente local de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), durante la ceremonia efectuada el pasado domingo por la tarde en el patio central del museo Francisco Villa, ante autoridades y diversas personalidades de la sociedad duranguense.
Rememoró que la solicitud para la firma de esta declaratoria comenzó hace casi tres años, con la participación de varios actores sociales y un marcado interés de Canirac que trabajó de manera coordinada con el historiador y cronista de la Ciudad, Javier Guerrero Romero, para que finalmente quedara elaborado el el documento que ya fue firmado por parte del gobernador.
Insistió que declarar la gastronomía tradicional de Durango como Patrimonio Intangible del estado, significa entre muchas cosas un toque de responsabilidad hacía la industria gastronómica de la entidad y aunque su platillo insignia es el Caldillo Durangueño, lo cierto es que hay muchos otros que paulatinamente irán dándose a conocer en los restaurantes de todo el estado.
Esta amplia riqueza gastronómica le dará fortaleza a todo el estado de Durango, pero traerá un detonante económico y turístico que obliga a los restauranteros para mejorar atención y servicio, en un entorno de la reactivación económica post pandemia.
Por su parte Javier Guerrero Romero en su intervención durante la ceremonia detalló que hablar de la gastronomía local es referirse no solamente al Caldillo Durangueño, también es hablar de enchiladas rojas dulces, quesos frescos y añejos, carne seca, carne adobada, infinidad de dulces tradicionales a base de productos regionales como leche y nuez, además de conservas en almíbar o vinagre.
Sin embargo, precisó el cronista de la ciudad que al comenzar a investigar y enlistar la amplia gama de alimentos que se elaboran en Durango, logró descubriese que son más de 150 platillos, convirtiéndola en una de las gastrononias más ricas que se tienen identificadas.
Guerrero Romero insistió en que esta es una gran oportunidad para que los restaurantes locales retomen platillos de tan amplia gama que ya no se preparan o están fuera de circulación, pero ademas las escuelas culinarias también deben transmitir la enseñanza de su elaboración a los nuevos cocineros.
