Las calles de la ciudad fueron invadidas por el comercio informal durante esta temporada y ese descontrol causó que la movilidad subiera hasta un 40% con relación al año pasado, cifras que resultan alarmantes debido a que la Dirección de Inspección Municipal no ha sabido lidiar con esta situación que traerá consecuencias en la salud de muchas personas, señaló Alejandro Castro Miranda.
El presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico recalcó que como nunca se vio incrementada la movilidad en el primer cuadro, y con la complacencia e indiferencia de la autoridad directamente encargada, en este caso Inspección Municipal.
A pesar de que ya tiene cuatro meses en el cargo como director de Inspección Municipal, César Rosales Hernández no paso su "prueba de fuego" esta navidad y simplemente se le salió de control el comercio informal, que como nunca invadió las principales calles de esta ciudad especialmente del 19 al 24 de diciembre.
Incluso el presidente de la Comisión de las Actividades Económicas del Cabildo, reconoció que no se autorizaron permisos para invadir la vía pública, por lo que se estima que hasta 150 comerciantes salieron a las calles sin la autorización correspondiente.
Tras la apertura de la actividad económica luego del semáforo rojo, cientos de vendedores se han lanzado a las calles para ofrecer sus mercancías y así intentar recuperarse de las pérdidas ocasionadas por la pandemia, sin embargo este desborde ha hecho que la movilidad haya alcanzado niveles jamás antes vistos y que pudieran traer consecuencias en la salud de mucha gente que no tomó las debidas precauciones.