La ganadería del sector social está colapsada, ante la sequía que hoy se presenta en el estado de Durango suman miles de cabezas de ganado que han muerto, el precio del ganado y de las exportaciones han caído hasta en un 60%, declaró Oscar García Barrón, quien pidió a las autoridades estatales y federales que la veda electoral no detenga el programa de suplemento alimenticio.
El presidente de la Unión Ganadera Estatal del Sector Social, declaro que la situación de la actividad ganadera, se ha venido complicando conforme avanzan los días sin lluvias en el estado de Durango. Durante los recorridos que emprendemos diariamente por diferentes puntos de la entidad vemos ganado muerto por la falta de agua y alimento.
García Barrón, comento que los productores de la Unión Ganadera del Sector Social, están en la disposición de aportar lo que les corresponda para la adquisición de suplemento alimenticio. El gobierno estatal, ya nos ha entregado cien toneladas, pero pretendemos que se puedan alcanzar las 3 mil o más, expresó.
La ganadería y la agricultura en la entidad a traviesa una de sus peores crisis, por la falta de lluvias y apoyos del gobierno federal. Ya est5amos en el mes de mayo y no hay agua, pero lo más lamentable es saber que los pronósticos de lluvias no son buenos.
Hoy nuestros productores no pueden exportar sus animales, están bajos de peso y no hay condiciones para que mejoren, lamentablemente quienes quieren vender sus vacas, se las están comprando en 12 pesos el kilo cuando anteriormente el precio era de 27 pesos, expresó.
Durante la charla, hizo un llamado a las autoridades federales y estatales para que en estos tiempos de elecciones y de veda electoral, no suspendan el apoyo a los productores, que el suplemento para los animales llegue, que la semilla forrajera no se postergue para que en cuanto llueva, el productor pueda sembrar.
Los animales no saben de tiempos políticos, los animales necesitan de alimento y agua, si no hay un programa para mitigar la sequía, el hato seguirá disminuyendo a causa de la muerte, finalizó García Barrón.