Dina, sobreviviente de meningitis, hoy celebra la vida

Agradecida con su familia y el apoyo que recibió durante el momento más difícil de su vida, hoy busca generar una red de apoyo para quienes pasaron por la misma situación

Belem Hernández | El Sol de Durango

  · miércoles 10 de mayo de 2023

Dina Simei Román Díaz, sobreviviente de meningitis en Durango, hoy celebra la vida / Foto: Lulú Murillo | El Sol de Durango

El agradecimiento a la vida, es la principal celebración que recibirá Dina Simei Román Díaz, este 10 de mayo, pues al ser sobreviviente del brote de meningitis fúngica crónica, hoy busca sanar emocionalmente y realizar un red de apoyo para las mujeres que pasaron por dicha condición.

Psicóloga de profesión y madre de tres hijos, Dina recuerda aquel 15 de octubre cuando dejó a su hijo de escasos 15 días de nacido y a su pequeña de 11 años, para internarse en el hospital e iniciar la lucha contra una enfermedad desconocida en ese tiempo para todo el mundo.

Después de cinco meses y medio hospitalizada, dos neurocirugías y estar en coma inducido durante más de un mes hoy está preparada para tender una red de apoyo y así “no se apague la llama”, dijo al lanzar un llamado a la ciudadanía que no se deje apagar, ya que “se nos apago la luz en nuestras casas, en nuestros hogares e inclusive el amor de seres queridos que se nos fueron, yo quiero que ellas sean honradas, sean recordadas no solo por el hecho de haber atravesado por la meningitis aséptica fúngica crónica, sino por el hecho de que cada una de ella tenían las ganas de vivir y la mismas ganas y lucha por abrazar a sus hijos y no lo lograron, como sociedad debemos aprender a hablar y encender luces de victoria para todas ellas y sobretodo de lucha para quienes seguimos en tratamiento, ya que son casos únicos a nivel mundial, necesitamos no dejarlo a la deriva, necesitamos ser una red de apoyo y estar unidas”.

Este 10 de mayo Dina celebrará la vida y ser madre con una conferencia dedicada a sobrevientes y familiares de la meningitis, pues considera indispensable sanar las heridas emocionales que ha dejado en cada persona dicho suceso.

Después de 15 días de haber dado a luz por medio de una cesárea, la cual era necesaria, la psicóloga inició una nueva historia, no de cambiar pañales o de amamantar, sino de aferrarse al amor de sus hijos, esposo y familia, para tener fuerzas hasta que los médicos encontraran el medicamento que podría salvar su vida.

En su momento más crítico es cuando nace la idea de compartir experiencia y generar una red de apoyo, “al estar en estado grave de convalecencia, con dificultad física, emocional e incluso espiritual, de la cual no recuerdo ese trayecto, pues por mes y medio estuvo en completa amnesia ya que se alojaron bacterias en mi intestino, tuve Covid e influenza al mismo tiempo, estaba al borde de la muerte”, dijo Dina, quién al despertar, después de una primera neurocirugía creía que había dormido por una noche pero ya había pasado un mes y medio, y es ahí cuando se da cuenta del daño colateral que había pasado mientras dormía, pues su familia le ha contado cada detalle de su estancia en terapia intensiva.

Dina Simei Román Díaz, sobreviviente de meningitis en Durango, hoy celebra la vida / Foto: Lulú Murillo | El Sol de Durango

Poco tiempo después llegó la segunda neurocirugía y es cuando inicia a construir una espiritualidad para tener la fortaleza y poder salir avante de la intervención, “la expectativa hacia los doctores fue muy alta, uno me dijo, Dina para entrar a cirugía necesitas mucha oración, otro me dice, Dina tienes un gran ángel”, fue ahí cuando se dió cuenta que la batalla debía continuar siempre de la mano de su familia y con cuidado constante y especializado de cada médico, enfermeras y enfermeros por quienes hoy está contando su historia.


La parte más complicada para ella fue cuando al despertar y querer moverse, su cuerpo adolorido no respondía, pero la motivación de ver a sus hijos le dio para salir adelante. Además del amor incondicional que sintió a su lado, hoy la convierte en un paciente controlado, ya que es una enfermedad crónica, de la cual aún falta mucho por saber.

“No se debe caer en el error de vivir con temor, ya que desde ese estado no se puede hacer la referencia hacia la vida, nos podemos considerar sobrevivientes de este estado físico que nos amenazó, pero no nos podemos considerar sobrevievientes de nustras emociones, por que muchas veces las emociones nos llevan al tope”, explicó la entrevistada.


Relató como al estar hospitalizada decidió cómo vivir el día a día, desde ver a las palomas con sus pichones, saludar a mucha gente y platicaba con más, poco a poco conoció otras historias, las cuales llevaban a un mismo fin “las cosa mas importantes de la vida y que valoras es la familia, salud, felicidad y emociones, mientras que el estatus material pasa a segundo plano, pueden ser necesarios pero no primordial”, añadió que las pacientes han pasado etapas de duelo, pues perdieron la salud, a sus bebes e incluso existe enojo por lo que sucedió y cómo sucedió, por ello es importante empezar a transformarse.

Y uno de esos reencuentros fue cuando regresó a casa y tomó a su hijo en los brazos, “me volteó su carita, pero entiendo que necesita su espacio”, ya que el pequeño fue criado por la suegra y hermana de Dina e incluso su cuñada lo amamantó por tres meses luego del ingreso al hospital, ahora con el alta ambulatoria vive bajo el precepto de saber que no hay culpables sino responsables, “he encontrado en la parte emocional mucho enojo, tristeza, desesperación, angustia en las familias y sobrevivientes, pero tenemos que trabajar en un principio básico para comenzar a sanar, el cual es aprender a perdonar”.

Añadió que es un proceso difícil de adoptar, pero es un regalo no para quien hirió, sino hacia la persona de ellas y así liberarse de emociones.

La conferencia que impartirá será la punta de lanza para comenzar a sanar todas las sobrevivientes desde una red de apoyo bajo herramientas de vida.


Expuso que a decir de la investigación de Joaquín M. Fuster, quien habla sobre el alma de un ser que esta en el sistema nervioso central, ellas fueron corrompidas desde lo más profundo, ademas los daños colaterales de las familiares, hijos y esposos están ahí y deben empezar a sanar, “no significa un sanar físico, sino emocional y por ello la conferencia está pensada en todas las sobrevientes para que aprendan a vivir en plenitud”.





Dicha conferencia se replicará en diversas sedes pues hay generaciones que necesitan la contención emocional, ya que hay hijos que jamás conocerán a sus madres, expuso Dina, quien adelantó que está por concluir un libro, al cual llamará “Misericordia”, mismo que comenzó a escribir dentro del hospital y cuyo tema será más cercano a la espiritualidad, vista desde la conexión y no desde la religión.

La cita para asistir a la conferencia es este jueves 11 de mayo en calle Pereyra 1407, a las 17:00 horas, cupo limitado, entrada gratuita.