Este año se han registrado 148 reportes por vulneración de cuidados de niños y adolescentes, que representa una disminución del 23 por ciento en comparativa con el mismo periodo del año 2021, informó José Luis Herrera Herrera, procurador de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.

Este año, a la fecha se tiene un acumulado de 47 niños, niñas y adolescentes que han sido separados de sus familias y han tenido que ingresar a algún centro de asistencia social con los que cuenta DIF Estatal, que en comparativa con los mismos meses del año pasado, se tiene una disminución de ingresos en un 32 por ciento.

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Dijo que sigue predominando con un 72 por ciento la omisión de cuidados, principalmente relacionado con el consumo de algún tipo de estupefaciente por parte de alguno de los familiares.

En los casos es los que se ha comprobado la omisión, que ha sido en un 39 por ciento de los reportes, se hace un caso de restitución de derechos, y si la omisión es tan grave como para que el niño tenga que ser separado de esa familia, primero se tiene la obligación de buscar algún familiar directo que pueda hacerse cargo de los niños, en tanto los padres llevan a cabo su proceso de rehabilitación, o llevan terapia psicológica, o bien generan las condiciones necesarias para el menor.

Cabe resaltar que se presenta este 2022, un 12 por ciento de aumento de reportes comprobados en relación al año anterior, en relación a los casos que se comprueba la omisión.

“Si llegará a darse la situación en que los niños tengan que ser retirados del domicilio y que no se ubicara ningún familiar, necesariamente tienen que ingresar a casa hogar, o a alguno de los centros autorizados por la procuraduría” dijo.

Para que los padres de estos menores perdieran la patria potestad, necesariamente tiene que haber un abandono comprobado de los hijos, es decir, no basta con que se presenten a preguntar por el estado de salud o cómo vaya el procedimiento, sino que en realidad inicien acciones tendientes a modificar la situación que originó el ingreso del niño, por ejemplo; si se trató de consumo de drogas, deben comprobar a la Procuraduría que están asistiendo a tratamiento ambulatorio o residencial según sea el caso, deben ser acciones tangibles de que si hay la intención del cambio.