La migración hacia Estados Unidos, es de mujeres prácticamente en un 50 por ciento, cuando anteriormente era en fenómeno casi exclusivo de hombres, por ello más que nunca se debe trabajar en la materia con mayor perspectiva de género, y sobre todo en atención a los derechos humanos de todas estas mujeres, informó Eunice Rendón Cárdenas, especialista en migración y seguridad preventiva.
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La especialista, a invitación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) de Durango, expuso la conferencia “Migrantes y Derechos Humanos, Mujeres Constructoras de Paz”, destacando que muchas mujeres que migran son madres de familia, y se hacen cargo del hogar, viven en una familia monoparental, y los riesgos al cruzar la frontera se multiplican.
“Muchas veces el riesgo lo tienen desde que salen, porque muchas están huyendo por violencia familiar, violencia de género, violencia política, luego en el tránsito son quienes corren más riesgo porque van regularmente con menores, con los niños migrantes en caminos que realmente son muy peligrosos”, dijo.
Mencionó que las mujeres migrantes además se exponen a violaciones sexuales, al grado que muchas cuando van en el camino deciden tomarse con previsión la pastilla del día siguiente, a sabiendas que pueden ser abusadas.
“Hemos visto imágenes de las cámaras de patrulla fronteriza, ahora como los traficantes avientan desde lo alto de las bardas para cumplir su tarea de tráfico, no sólo a hombres y mujeres, también a niños desde alturas de más de cinco metros, algunos se lesionan piernas y rodillas, se lastiman las piernas”, señaló.
En el caso de niños migrantes, se obtienen datos muy precisos desde 2014 que se dio la primera gran crisis, con más de 40 mil que llegaron a Estados Unidos, desde entonces ha ido fluctuando de 30 mil a 70 mil, como fue en el último año de gobierno de Donald Trump.
