Más del 80 por ciento de la red carretera en Durango presenta ya daños profundos, esto duplica y en ocasiones hasta triplica el costo de la misma, informó el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Salazar Mendía, al detallar que es la carretera que va del municipio de Santiago Papasquiaro a Tepehuanes la que requiere intervención de manera urgente.
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Aseguró que otra rúa con focos rojos es la que conduce de Rodeo hacia los límites con Chihuahua, ya que existen algunos tramos en condiciones deplorables; así como del poblado La Zarca, hacia el municipio de Mapimí también ya tiene muchas zonas inseguras por la calidad de la superficie de rodamiento.
Una carretera más cercana a la ciudad es la que conduce a Nombre de Dios, y que también necesita reparación de manera urgente ya que se trata de una reconstrucción que se realizó hace varios años atrás y ante la falta de mantenimiento, ya se tiene un daño profundo a la superficie de rodamiento, e incluso en algunos tramos se requiere una reconstrucción.
No se tiene una cantidad precisa de a cuánto ascienden los daños que registran las carreteras en el estado, sin embargo si en el mes de enero se habían asignado 380 millones de pesos, “ahorita tendríamos que hablar de 900 millones de pesos”, estimó el empresario que se requieren para arreglar de fondo las carreteras prioritarias, y para aquellas que necesitan una reparación profunda se necesita el doble o el triple de recursos.
Aunque se pidió a los Gobiernos municipales apoyar en las obras de reparación de su red carretera, hasta el momento se tiene conocimiento de que en el municipio de Nuevo Ideal han comenzado a realizar algunas rehabilitaciones con sus propios recursos, sobre todo aquellas donde se tiene el daño más severo.
Explicó que la carretera de Rodeo hacia Chihuahua, la carretera está prácticamente destruida y esto ha llevado a la presencia de accidentes viales donde se han perdido vidas, sobre todo en el tramo donde se ubican las curvas, es muy angosto lo que provoca una situación de riesgo.
Actualmente está por salir un plan de obra estatal, enfocado en las micro y pequeñas constructoras, inversión con la que se espera activar al 70 por ciento de este tipo de empresas, pues se trata de obras a realizar en el sector educativo como la construcción de aulas nuevas, ampliación de la escuela, construcción de canchas y domos.
“Muchos contratistas optan por trabajarle a educación, porque es un recurso muy seguro”, comentó Salazar Mendía, quien señaló que ya se cuenta con un monto para invertir por parte de las instituciones públicas, por lo que son ellos quienes deben realizar ajusten en caso de un alza en los insumos, como reducir metas, pero sin afectar los costos presentados y aprobados.
