Fue en 1844 que comienza la historia de lo que ahora se conoce como el Panteón de Oriente, mismo que para 1860 inició su conformación de manera formal con el entierro de Ruperto Aragón en este mausoleo.
Es el panteón de oriente el que alberga el museo de arte funerario donde resalta la obra del maestro cantero Benigno Montoya, quien dejó una colección de 88 piezas, entre las que se encuentran 36 ángeles; aunque su padre Matías Montoya y su tío Jesús también cuentan con algunas piezas, cuyas obras muestran una tendencia al arte neogótico.
Dentro de sus trabajos más representativos se encuentra “La piedad”, escultura en alto relieve que de acuerdo a las proporciones praxiteles resalta por la composición anatómica, la tención y la proporción muscular, además de la expresión facial. La iconografía nos muestra un complemento muy detallado de lo que es el descendimiento de la cruz, es una escultura en la cual aparece Cristo descendiendo de la cruz y María acogiéndole en su regazo. Los drapeados del manto, los detalles milimétricos como la escultura del iris de María hacen de “La Piedad” una de las obras más destacadas del maestro Montoya.
La imagen del museo es representada por la escultura del ángel Juanito, en alusión a Juan N Contreras, un hombre de 68 años que fue sepultado en el lugar. A dicho sepulcro se le han inventado una serie de leyendas que han propiciado su deterioro. La escultura representa la redención del alma en una proyección del serafín, el cual sostiene en su mano una cruz que representa el compartir la muerte con Cristo para alcanzar con él su resurrección.
Nuestras vidas se fundieron de amor al fuego candente, mas las iras atrajeron del que dichas no consciente. Y arrebatar mi tesoro llegóse la muerte impía llevándose a la que adoro. ¡Cuca Mía!
De la tumba de María de Refugio sobresale la escultura de un árbol, monumento que nos muestra el nido de unos pichones y sobre las raíces del árbol una paloma degollada. De esta historia de amor trágico entre el Comandante Gabriel Gavira y su esposa María del Refugio a quien cariñosamente llamaba Cuca nace una de las leyendas más populares de nuestro estado “Cuca Mía”.
Es la escultura dedicada a la Cuca Mía la única obra del Maestro Montoya que cuenta con su firma.
El Panteón de oriente es donde se encuentra sepulta nuestra historia y resguardada por grandes obras de maestros canteros que hacen de este no solo un panteón, si no un museo de arte funerario.