Para Gibrán Ramírez Reyes, candidato a la dirigencia nacional de Morena, el Partido debe abrirse para desplazar a los políticos profesionales de siempre, en lo que para él representa un desafío y no solamente en Durango sino en buena parte del país, donde intereses políticos y de todo tipo influyen en el actuar de esos cuadros tradicionales. A la vez, del que haya muchos participantes en la búsqueda de la presidencia de Morena, opina que es positivo, y que es un referente de las ganas que existen de tomar parte en este proceso como resultado de dos años de parálisis en este instituto político; “seguramente el resultado tendrá mayor legitimidad que la dirigencia que hemos tenido los últimos 24 meses”.
En charla para los lectores de El Sol de Durango, Ramírez Reyes sostiene categórico que es importante purificar el Partido.
En tal sentido, el aspirante entronizó que es una tarea principal en su gestión incorporar nueva gente a la política, a los cargos de representación, desde las regidurías y hasta las diputaciones locales, buscar líderes comunitarios que no hayan hecho carrera partidista y menos clientelar.
Es necesario renovar al personal político, reitera el entrevistado; “López Obrador decía que es hora de dejar el camino a gente nueva y eso no significa necesariamente jóvenes, porque también el ama de casa que no ha participado políticamente puede entrar, así como la maestra, la médica jubilada, que tienen ganas de participar y son gente nueva”.
Hay que abrir el Partido a eso perfiles para desplazar a los políticos profesionales de siempre y precisamente esa será una tarea fundamental en mi gestión, la renovación del personal político.
Reconoció que alcanzar este objetivo será un desafío y no solamente en Durango, sino en buena parte del país, porque son muchos intereses económicos y de todo tipo que están metidos en la relación con esos cuadros políticos profesionales.
Aclara que no implica conflictuarse con esos intereses, pero sí es necesario abrir cada vez más paso a que gente común tome las decisiones que afecten a todos.
Finalmente habló de la cantidad importante de cuadros que pretenden dirigir morena en el ámbito nacional. Al respeto, dijo que ello evidencia las ganas de participación que han dejado dos años de parálisis, y está bien, porque es una manifestación demócrata; “seguramente el resultado tendrá mayor legitimidad que la dirigencia que hemos tenido estos dos años; eso va a ser útil”.