En el Parque Industrial Ladrillero (PIL) viven cerca de 200 familias, dicho lugar no fue creado bajo la vocación de ser poblado, sino de que fuera un lugar industrial donde sólo se maquilara el ladrillo, señaló Francisco Franco, director de Medio ambiente municipal.
Actualmente se realiza un censo con tres vertientes: saber cuántas ladrilleras están ubicadas en la mancha urbana, periferia, en activo o se puedan reconstruir en el Parque Industrial Ladrillero (PIL), dicho registro ayudara a tomar medidas de la mano del Juzgado Administrativo y cámaras empresariales para aplicar sanciones a los que ya fueron retirados y han reincidido y para formar estrategias de compra venta.
“Este es un problema complejo” señaló en entrevistado, quien al referirse a la vocación inicial del PIL dijo que era una zona industrial y con el tiempo las familias se mudaron allá y se generaron problemas de salud, educación y servicios públicos, por tanto se implementaran acciones que permitan cuenten con condiciones optimas de trabajo y morada.
Agregó que al llegar la administración municipal actual se dieron cuenta que el PIL se encuentra en abandono, ya que sólo funcionaba una plataforma de las cuatro que tenían, función vital para cargar los ladrillos, “si no se solucionan las carencias de infraestructura y desarrollo humano, no se puede pensar que todo el ladrillo que necesita Durango saldrá de ahí”.
Francisco Franco explicó que en dos semanas concluirá el censo el cual dará pie a tomar acciones inmediatas tanto de reubicación, sanciones a ladrilleros que recibieron programas en otras administraciones para retirar los obradores y beneficios para los que produzcan ladrillos en el PIL.