Aispuro se afilió a Acción Nacional, y si analizamos todo el primer círculo del Gobierno del Estado, no son panistas.
En realidad usaron al PAN para llegar, pero realmente no gobierna ese Partido al estado de Durango.
Con esta reflexión, arranca una charla más del programa Rostros, que El Sol de Durango llevó a cabo en su tercera emisión, con entrevista al dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional, Luis Enríque Benítez Ojeda, quien aclara que no son Jorge Herrera o Ismael Hernández, quienes mandan en el tricolor, porque el PRI no tiene dueño y, entre otros aspectos que toca en esta plática, asevera categórico que a pesar de las circunstancias, el tricolor sigue siendo el Partido más grande y más importante de México.
ACCIÓN NACIONAL
No veo que Adrián Alanís, Jesús Arturo Díaz Medina, Arturo Salazar Moncayo, Joel Corral o Ruth Medina, sean miembros prominentes de Acción Nacional, refuerza el dirigente.
En realidad el PAN no figura en la cúspide de la administración estatal.
Se trata de un gabinete más de afinidades, de amigos del gobernador.
Aclara que desde luego el hecho no es para generar orgullo, dado que les gustaría que el gobierno fuera netamente del PRI, y para ello están trabajando desde ya, para recuperar en 2022.
LLEGÓ AL PRI
Luis Enrique Benítez Ojeda comenzó su gestión al frente del comité directivo estatal el 27 de agosto de 2017 y concluirá el 27 de agosto de 2021.
Ahora trabaja fuerte rumbo al 2020, un año en que no hay elecciones, empero, la proyección es llegar fortalecidos al 2021, en que habrá elección concurrente, para elegir diputados locales y federales.
Le tocó tomar al PRI en un momento en que por primera vez en la historia pierde el Gobierno del Estado, un PRI derrotado al que había que reconstruir desde abajo, recobrar la unidad tricolor, con la necesidad además, ante la falta de recursos, de hacer mucho con poco.
Se ha tratado, dice el dirigente, de una tarea ardua, pero reconfortante por la posibilidad de servir al PRI y a los priistas de Durango en los momentos más difíciles.
LOS EX GOBERNADORES
Aclara que el PRI en Durango no es de nadie en particular, y que en efecto, por el hecho de que en el comité directivo estatal se observan caras que colaboraron en los gobiernos de Ismael y de Jorge, se pudiera pensar que el instituto político está bajo la conducción de ellos, sin embargo, no es así, porque el Partido es de todos, está abierto a la ciudadanía, a la militancia, a los duranguenses.
Y es que, ante la versión que indica que en realidad son Jorge Herrera e Ismael Hernández, quienes manipulan las labores priistas, Luis Enrique Benítez sostiene que todos los ex gobernadores constituyen un valor importante para el Partido.
Reconoce el legado de Héctor Mayagoitia, de José Ramírez, de Angel Sergio Guerrero Mier, así como de Ismael Hernández y de Jorge Herrera. Por circunstancia, la gente que está hoy es cercana a los dos últimos gobernadores y es algo natural. El PRI no tiene dueño, el PRI es de los priistas, recalca.
HIJOS DE EX GOBERNADORES
El dirigente priista habla de la presencia de hijos de ex gobernadores en la administración panista.
Aquí, precisa primero, que no le consta que los exmandatarios hayan operado en contra del Partido en las elecciones de 2016. Es más, afirma que está seguro que no lo hicieron.
En esta parte, reflexiona que lo que sí tiene claro es que el doctor Aispuro Torres, es un priista que no encontró cauce para llegar a sus aspiraciones dentro del Partido y que ahora, ha invitado cuadros tricolores para conformar su equipo de trabajo, lo cual no significa que estos cuadros hayan dejado de ser parte del PRI y que hayan adquirido una nueva militancia.
No obstante, subraya que sí es importante profundizar en el análisis sobre la existencia de una delgada línea, donde debe definirse de manera precisa, hasta dónde es válido o no, participar como priista en otras administraciones de diferentes colores.
ESTABAMOS MEJOR
El trabajo principal que desarrolla el PRI en este momento es fortalecerse, reordenarse, para tener posibilidades reales de ganar la elección el próximo año, recuperar los distritos electorales y llegar al 2022 de nuevo a ostentar la gubernatura del Estado.
De ello, Benítez Ojeda está convencido, pues afirma que se tiene la confianza de la gente, que abiertamente ha manifestado que “estábamos mejor con el PRI”.
Añade que la expresión clara es en el sentido de que no se ha visto en la alternancia algún cambio tangible para bien y que tampoco en Morena se proyecta una opción verdadera que redunde en mejores condiciones de vida para los duranguenses.
En tal contexto, considera que si los priistas unidos, con una sola proyección, “nos dedicamos a servir verdaderamente, con vocación y talento político, podemos volver a constituir una opción para gobernar este hermoso estado”.
IHD, EL TRANSFORMADOR
El entrevistado refuerza su proyección para regresar a ser gobierno y además de reiterar la convicción popular de que son mejores los gobiernos priistas, sostiene categórico que a nadie le queda duda de que fue Ismael Hernández Deras el gran transformador de la entidad, con el desarrollo de importantes obras que en muchos de los casos, fueron continuadas por Jorge Herrera Caldera, además de las que éste desarrolló, para alcanzar un desarrollo en Durango como no había ocurrido en muchos años.
Explica que por eso quieren volver a ser gobierno, para continuar el desarrollo, doblegar el estancamiento que hoy se vive, es decir, la idea no es solamente llegar por llegar.
Asegura que no es una misión imposible, se trata de una tarea posible, sobre todo porque existe claridad en la sociedad de que con el PRI, había mejores presupuestos, obras importantes como las del centro histórico, las carreteras, el centro ferial, etcétera.
LA RENOVACIÓN
En este tarea de renovación del Partido, recién se llevó a cabo el nombramiento de nuevos cuadros en las diferentes carteras del comité directivo estatal.
Ahora sigue también la renovación de los 39 comités municipales, para seguir luego con el cambio en los 39 consejos políticos.
Además, destaca en esta vía, también la revisión que se hará para modificar donde sea necesario modificar, en el caso de los más de 2 mil 400 seccionales que hay en el Estado, que son la célula básica del Partido.
De nuevo, Benítez asegura que sí hay estructura para recuperar el terreno perdido, porque el PRI a pesar de las circunstancias, sigue siendo el Partido más grandes y más importantes de México.
VIVE DE SUS PRERROGATIVAS
Pudiera afirmarse que el PRI en Durango vive la más difícil situación económica en toda su historia.
Sin embargo, el Partido vive económicamente hablando, de sus prerrogativas, conformadas mensualmente por poco más de un millón de pesos, para cubrir nómina y todo el gasto corriente del instituto político.
Así, luego de que en sus mejores tiempos, observó una nómina con más de 120 personas, ahora alcanza algunos 55, menos de la mitad.
Ahora se carece del recurso, que no era poco, y que surgía de tocar puertas de amigos funcionarios de gobierno, que apoyaban con recursos para hacer gestión social. Eso no se tiene hoy.
Y es que, aunque la administración estatal cuenta con una buena cantidad de priistas, éstos no abren la puerta a la gestión del Partido o simplemente no se busca, porque se entiende la posición.
Por cierto, todos estos priistas en funciones dentro de un gobierno panista, no pagan cuotas al PRI y aquí, la reflexión del dirigente es en el sentido de que se trata de un asunto que se tiene que revisar, porque el PRI tiene que ser más exigente con ellos y que paguen aunque sea poquito, pero seguro, una cuota a la que todos los tricolores están obligados.
En contra parte, en los municipios priistas, sí se atiende esta obligación por parte de funcionarios y regidores que portan los colores.
MARINA VITELA
A propósito de los municipios, en Gómez Palacio gobierna a partir del 1 de septiembre Marina Vitela, por MORENA, quien aún se encuentra integrada al registro partidario tricolor.
Al respecto explica que se desarrolla en este momento un procedimiento muy burocrático porque así lo marcan los estatutos, y que está punto de concluirse dentro de Justicia Partidaria, y dar de baja a todos aquellos que fueron candidatos o candidatas a cargos de elección popular por otros partidos.
Sucede que dentro del proceso interno que vivió el PRI, aparecían algunos priistas como Marina o como Otniel García. De ahí la necesidad de depurar, en lo que además es una exigencia del Instituto Nacional Electoral, dado lo que ocurrió en los dos últimos años electorales, donde el “mercado político” fue una constante, con una gran cantidad de cuadros que cambiaron de camiseta.
EMIGRAR A OTRO PARTIDO
Luis Enrique Benítez Ojeda jamás ha sentido deseo de pasar a formar parte de las filas de otro instituto político.
Se define como un priista que si bien ha sido crítico severo del Partido, su lucha la ha dado desde dentro.
Aquí, recuerda que fue de los promotores de abrir los procesos de elección, de que hubiera consulta a la base y menciona su participación en los procesos en los que se convirtieron candidatos, luchando contra corriente, Jorge Clemente Mojica Vargas o Ismael Hernández Deras.
Sostiene que siempre ha sido priista y nunca ha estado con un pie dentro y el otro fuera y pensando en irse.
Añade luego que “todos queremos ser gobernador”. Cuestionado si trabaja en esa proyección, aclara que está trabajando para el PRI, porque primero, antes de las aspiraciones, es fundamental fortalecer al Partido, que verdaderamente sea una opción para la sociedad “y si en ese garantizar, mi nombre se anota y en su momento, hubiera las condiciones y las posibilidades, lo valoraría”.
LA CAPITAL, EL DESAFÍO
El entrevistado es optimista y refiere el cambio radical que experimentó su partido apenas en un año, entre las elecciones de 2018 y las de 2019, cuando primero sufrieron una arrastrada por el fenómeno AMLO, y ahora, con un recuperación importante.
Reconoce que sin lugar a dudas, el desafío mayor para el PRI es la capital del Estado en términos electorales.
En Victoria de Durango les falta trabajo político y cercanía con la comunidad. Hay personas que ha adquirido la mala publicidad del PRI, porque en efecto, ha habido hombres que le han fallado al Partido.
Ha habido gobernantes y servidores públicos que se han excedido y que hoy están huyendo, siendo perseguidos o están convictos o sometidos a algún proceso penal.
Considera que no tiene por qué la institución priista cargar con el lastre de esos malos priistas.
Otro aspecto que significa desventaja para el PRI, explica, es el hecho de que en los últimos años los de enfrente han cooptado, comprado, liderazgos priistas que “también hay que decirlo, ante la necesidad económica que existe, cayeron en la tentación de servirle a otras fuerzas políticas”.
AISPURO DESEA SERVIR
Al formular un análisis sobre los tres años de gobierno de José Rosas Aispuro Torres, Benítez Ojeda señala que se trata de un mandatario que quisiera hacer mucho, que desde servir bien a Durango, pero que no ha logrado armar un buen equipo de trabajo, porque un gobernante no puede solo.
Expone que como PRI se ha insistido en que se hagan cambios, empero, no los ha querido hacer. Es su facultad.
En el terreno de los hechos no se advierten cambios trascendentales. No ha habido una sola obra importante en la entidad.
Admite que sí hay mucha obra pequeña en el Estado, que no se desestima. Se refieren a una banqueta, a un sanitario, un aula, un domo, una remodelación de una clínica; “pequeñas obras que si bien son importantes, no son a lo que ha nos habíamos acostumbrado los duranguenses, con nuevas carreteras, como la Durango-Zacatecas o Durango-Tepic, entre otras, por hablar de un ejemplo”.
Entonces, estima que el Gobierno de Aispuro le está quedando a deber a la sociedad, porque las expectativas eran mayores.
Al hablar de un funcionario que eliminaría del gabinete estatal en caso de estar en su posibilidad, enérgico aclara que no uno, sino cuatro, y los nombra: Arturo Salazar Moncayo, Ramón Dávila, Joel Corral y Rubén Calderón, que no han sabido responder a su cometido.
LAS 90 MIL ACCIONES
Al cierre de la charla, opina sobre las anunciadas 90 mil acciones del gobierno de Jorge Salum del Palacio, y el dirigente estatal priista considera que se trata de un exceso y subraya: Yo conozco al presidente, fuimos compañeros diputados, hemos coincidido en algunos espacios públicos. Me parece que Jorge es un hombre serio que debe darse a respetar y que no puede empezar a decir disparates, en una forma de faltarle el respeto a la inteligencia de los duranguenses”.