Ilusiones por emprender en Durango hay muchas, sin embargo, también hay diversos factores que “echan” abajo estas intenciones, o que en el peor de los casos terminan con nuevos negocios.

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Éste es el caso de un joven que con esfuerzo impulsó su primer emprendimiento a raíz de un proyecto escolar, pero a seis meses de estar en funcionamiento su negocio, se vio obligado a cerrarlo de frente a elevados cobros por el servicio de la energía eléctrica.

Es su madre Mirsa Quiroga, quien utilizó las redes sociales para exponer lo sucedido con el comercio de su hijo a causa de recibos prácticamente impagables de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

“Hace seis meses mi hijo puso su primer emprendimiento: una frutería/cremería, que también era su proyecto escolar. Después de pagar todos los trámites, permisos, renta, mobiliario, refrigeradores, etc, pudo empezar con mucha ilusión”, comienza el mensaje en su cuenta de Facebook.

Donde expresa lo orgullosa que se siente como madre al ver que su hijo impulsó su propio negocio, mismo que logró ponerlo en funcionamiento por medio año.

“Ahhhhhhhh pero no llegara CFE a hacer de las suyas. Primer recibo mil, segundo recibo cuatro mil 500, tercer recibo siete mil. Y ¿qué te dicen? Eso salió y pague o no tendrá luz. Díganme que PYME sobrevive a esto”, reclama Mirsa Quiroga.

Y cuestiona el por qué no hay ninguna autoridad que regule a la CFE, pues estas acciones resultan ser negativas para la reactivación de la económica local.

Lamentablemente a causa de la CFE y sus altos cobros cierra la "Frutería y Cremería Jimena", la cual estaba ubicada sobre calle Nazas, número 709, casi llegando a Circuito Interior.