El puente del ferrocarril sobre el río La Sauceda, al sur de la cabecera municipal de Canatlán, quedó sin poder ser utilizado tras caer una de sus partes. Pese a que la infraestructura ya era obsoleta, la gente hacía uso del mismo para trasladarse cuando la corriente del río crecía.
Construido en el año 1900, cuando entró el ferrocarril a esta región del estado, el puente era alternativa de paso vial para vecinos del lugar que transitan para los predios agropecuarios de Las Macheras y pequeñas propiedades rurales que se encuentran en ese lugar, incluso del ejido Canatlán.
También es paso para habitantes de las localidades como San José de Gracia, Martín López y Nogales que acuden a realizar compras a ciudad Canatlán y también a estudiantes que transitan en motocicleta o bicicleta a sus respectivas escuelas.
En tiempos de creciente del río La Sauceda, el puente del ferrocarril era alternativa obligada y única para el paso desde hace muchos años. Luego se construyó el puente hacia la comunidad El Presidio, pero por las distancias la vía por la que se trasladaba el ferrocarril era la mejor opción.
Hoy que se festeja al ferrocarrilero, este puente es testigo de una época de bonanza por la presencia del ferrocarril en la región, sin embargo actualmente está olvido por parte de las autoridades municipales de Canatlán.