Este viernes, como ha ocurrido ya de manera habitual los días 3 de diciembre, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, han sido invadidos cajones de estacionamiento destinados a vehículos propiedad de gente que no padece discapacidad alguna, como una manera de reflexionar y hacer conciencia, cuando en Durango no se respetan los espacios para discapacitados en la vía pública, y donde hoy en día hasta el 60% de calles y banquetas no cumplen con las especificaciones adecuadas para facilitar la vida a este sector de la población.
Así lo destacó el empresario Francisco Rueda Castañeda, de la empresa Medic Ruecas, quien al encabezar esta acción lamentó que a pesar del paso de los años, no hay una cultura que indique un respeto a este sector de la población que requiere de infraestructura adecuada, inclusiva, para mejorar o facilitar su desempeño en la vida cotidiana.
Indicó que es más que evidente que no son respetados accesos a edificios, cajones de estacionamiento, rampas, etcétera.
“Por eso nosotros como empresa, tenemos ya tres años sumándonos a esta voz en la búsqueda de que se respeten los espacios públicos, pero no solamente eso, sino también decirle a las administraciones gubernamentales, que los espacios públicos que se construyan en lo sucesivo en la vía pública, cumplan con especificaciones y medidas adecuadas para la accesibilidad, hablamos de las banquetas, las rampas, que incluso en algunos casos son peligrosas”, reforzó el entrevistado.
Nos falta mucho por avanzar y por eso levantamos la voz a favor de las personas con discapacidad, para que cada trienio o cada sexenio, tanto el Gobierno Municipal como Estatal, destinen un porcentaje de su presupuesto, para que una banqueta al menos una cuadra del centro o de cualquier parte de la ciudad, cumpla con la especificación necesaria en todos los sentidos, a fin de provocar un cambio real en la concientización social.
Hoy en día hasta el 60% de nuestras calles y banquetas no cumplen con estas especificaciones; “sí hay rampas, pero no son adecuadas, porque hay casos en que hay hasta postes que impiden el paso libre de las personas”.