Ante los hechos ocurridos en la colonia Emiliano Zapata, en el ciudad de Durango, donde un sujeto le quitó la vida a un perro clavándolo a un poste, el diputado local Alejandro Mojica Narváez, propuso hacer modificaciones a la legislación vigente y que este tipo de delitos sean perseguidos de oficio, pues actualmente solo se actúa si hay una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE).
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Señaló que ya existe la ley en el Código Penal de Durango, donde se establece que los animales son seres sintientes y por lo tanto cualquier agresión en su contra que incluso los lleve a la muerte, es constitutiva a un delito con sanciones económicas que pueden llegar hasta un millón de pesos y cárcel hasta por cinco años en la parte penal.
“Actualmente si no hay una denuncia la autoridad no puede actuar, entonces ahora vamos a buscar que la ley sea de oficio, que se lleve a cabo la investigación y sobre todo que se castigue, ahí está en la ley”, comentó el legislador del Partido Acción Nacional (PAN), quien aseguró que en este caso en específico la sanción deberá ser de carácter penal.
En el caso del Juzgado Administrativo, quien dentro de sus facultades está la sanción de quejas por maltrato animal, su titular, Mario Pozo Riestra, afirmó que al haberle causado la muerte del animal, se constituye un delito que no tiene carácter administrativo, sino penal, por lo que le corresponde a la FGE realizar las investigaciones correspondientes para que se apliquen las sanciones.
“De haber solamente lesiones, está muy claro en los reglamentos del municipio, que le correspondería a Medio Ambiente, que son quienes tienen toda la facultad para atender el tema de los seres sintientes”, comentó el juez cívico municipal, quien aseguró que este tipo de acciones en contra de los animales son muy comunes, lo mismo que los casos de omisión de cuidados por parte de los dueños.
Explicó que existe mucho desconocimiento por parte de la ciudadanía sobre cómo debe tratar a los animales, sobre todo a los domésticos (perros y gatos), por lo que se les hace un daño quizás hasta involuntario, ya que anteriormente era común tenerlos amarrados, o en la azotea expuesto al sol, lluvia y frío.
Sin embargo en los casos más graves donde se atenta contra la vida de los mismos, como es el caso reciente, es necesario aplicar la sanción penal a través de la ley y posteriormente vigilar que el agresor sea tratado en su salud mental, ya que se sabe que quien agrede con violencia a un animal, es potencialmente peligroso para un ser humano.
