El proceso instaurado en contra del alcalde de Durango capital, José Ramón Enríquez Herrera -para dar cumplimiento a las sentencias emitidas por la Sala Regional Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación- “no es de tinte político ni mucho menos con dolo”, aseveró la presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, Sandra Lilia Amaya Rosales, en torno al conflicto suscitado entre la autoridad municipal y el poder Legislativo.
Amaya Rosales señaló categórica en torno al conflicto: “al contrario, nosotros estamos trabajando para que la gente vea que estamos haciéndolo de una forma correcta, la Comisión de Responsabilidades nos dirá qué es lo que prosigue, estamos haciendo sólo lo que nos marca la Sala Superior y así lo habremos de hacer”.
“No estamos incurriendo en ninguna falta, únicamente dimos seguimiento a un proceso que inició la legislatura pasada que debió terminarlo y no lo hizo, tenemos que darle seguimiento a todo lo que quede pendiente, vamos a dar seguimiento, el proceso tiene que terminar y así lo habremos de hacer”, apuntó la legisladora local.