La falta de hospitales o clínicas en las comunidades indígenas es un problema que agrava la pandemia, señaló Gabino Cumplido Muñoz, representante de los Pueblos Indígenas en Durango, quien aseguró que existe un abandono en tema de salud por parte por el gobierno del estado y federal que data de muchos años.
Explicó que con la llegada de la Covid-19 y la vacuna contra el virus, los habitantes de los pueblos originarios tenían resistencia a ser inmunizados pues había muchos mitos en torno a ello, pero con el paso de los meses y la sensibilización cada día acuden más personas para que se les aplique la vacuna.}
Al ser cuestionado sobre el recurso que se aplican en las comunidades por parte del INPI (Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas) respondió, “mientras el INPI no tenga recursos, no se le invierte a las comunidades”, y señaló que han sufrido recortes sobretodo en programa de Infraestructura Indígena, lo que acarreó afectación en construcción o reparación de carreteras, puentes, caminos, entre otros.
“Para carretera no hay dinero, antes de 10 a 5 kilómetros se pavimentaban por año, esté solo serán 3 kilómetros”, advirtió.
Cumplido Muñoz resaltó que tampoco tienen recurso para proyectos productivos en menor escala, pues el recurso fue destinado a la Secretaría de Bienestar, bajo el programa “Sembrando Vida”, el cual hay que trabajar con compromiso y responsabilidad, indicó, ya que en el Mezquital se erogan cerca de 300 millones de pesos por año, en dicho beneficio.
Para finalizar especifico que el INPI como otras dependencias solo realiza trámites, pues ahora el recurso llega de manera directa a los beneficiarios.