En una gira por el municipio de Santiago Papasquiaro, a un año de que se diera a conocer el primer caso de Covid-19 en Durango, el gobernador del estado José Rosas Aispuro Torres, acompañado del secretario de Salud, Sergio González Romero, visitaron el Centro de Salud y el Hospital Regional donde constataron la aplicación de las vacunas que esta semana llegaron para ser aplicadas a personas de la tercera edad de esa municipalidad.
Mientras realizaba un recorrido por las diversas zonas donde eran aplicados los biológicos, el mandatario bromeó al respecto con quienes se encontraban en el momento preciso de la aplicación de la vacuna y algunos más que estaban en la fila de espera o en el proceso de observación.
Asimismo dialogó con médicos y enfermeras quienes públicamente le externaron su preocupación por la falta de biológicos para el resto de sus compañeros, que pese a no estar en la primera línea de atención a pacientes Covid, han estado desde el primer día en las instancias de salud, bajo el riesgo de ser contagiados.
Ante esta petición, el gobernador de Durango, Aispuro Torres, explicó que ya se encuentran en negociaciones “tienen toda la razón, ahorita estamos trabajando con el Gobierno federal, con el secretario de Salud, para que precisamente que las personas que trabajan en la Secretaría de Salud, ISSSTE, Seguro, Sedena y en todos lados, son los que deben de vacunarse”, señaló en el diálogo que sostuvo con trabajadores.
Aseguró que coincide con ellos en que durante este primer grupo de vacunación también debe entrar el sector salud, incluso aquellos que no cuentan con 60 años y más, sin embargo se encuentran en el proceso de negociación para que en breve lleguen más vacunas al estado que alcancen a todo para todo el personal que se encuentra en la atención de enfermos en general.
“Gracias a todos por el apoyo que han dado para que este programa realmente llegue a quien debe llegar, que es a las personas más vulnerables”, dijo el mandatario antes de despedirse del personal de salud.