Hemos visto una circunstancia muy difícil, como nunca, con días en los que ni la cruz hacíamos, explica en entrevista con El Sol de Durango, doña Socorro Holguín, locataria del mercado Gómez Palacio con una antigüedad de más de 70 años en la venta de artesanías.
La pandemia nos está tratando como a todo mundo, nadie nos salvamos de sufrir las consecuencias y los locatarios del mercado Gómez Palacio no somos excepción, explica Holguín Ibarra.
A la vez, detalla que al asunto de la pandemia, se le añadió el hecho de que cuando fue declarada la contingencia sanitaria, “teníamos algunas semanas de haber salido del inmueble por la realización de las obras de mejoras que realiza todavía el gobierno del estado”.
A pregunta expresa, la comerciante admite: “Sí hemos visto una condición mejor en el edificio, porque antes los techos eran de lámina y cuando llovía, todos se nos mojaba. Las obras que aun se realizan comienzan a verse positivamente para nosotros”.
Recordó que para el desarrollo de obras, se informó que duraría entre dos y tres meses “y nos reubicaron temporalmente en la Privada del Parque Nuevo, donde duramos algunos cuatro meses, por cierto un cuatrimestre muy difícil, muy complicado, porque había días que ni la cruz hacíamos”.
Hoy en efecto, sí estamos viendo ya una mejora importante, la gente más relajada llega al mercado y se lleva sus artesanías; “ya no se habla tanto del virus y todos estamos agarrando nuestro ritmo”.
Es importante decir que en el mercado Gómez Palacio sí se cumplen protocolos de sanidad, con aplicación de gel y toma de temperatura a todos los clientes y visitantes; “para ello pagamos los locatarios una cuota de 70 pesos cada semana para la adquisición de los materiales necesarios para cumplir sanitización”.