Entre el parque Sahuatoba y el parque Guadiana de la capital de Durango se tiene un inventario de 22 mil 024 árboles, de los cuales en su mayoría son eucaliptos y pinos, a los que se les dan los cuidados y mantenimiento correspondientes por parte de la Dirección de Servicios Públicos Municipales.
Aixa Bujduj integrante del movimiento "Preservemos los parques Guadiana y Sahuatoba", apuntó que se han dado cuenta de algunas necesidades y cuidados que requieren estas áreas, en temporada de calor por ejemplo hace falta agua para los árboles, por la escasez de lluvia.
Señaló también que lo más importante para la preservación y cuidado de los parques, primero por parte de la ciudadanía es tomar consciencia y respetar estas áreas, mientras que a las autoridades les corresponde una mayor capacitación del personal para el tratamiento de cada zona dentro del parque pues requieren diferentes cuidados, para lo que se necesita una mayor inversión.
En el parque Sahuatoba por ejemplo mencionó que se debe retomar el cerco verde, que es un muro planeado con pura vegetación, que se presentó en esta administración para delimitar el área y cuidar la flora que se encuentra en el lugar.
En este mismo parque pero en la zona cercana a la concha acústica, dijo que hay una parte virgen, donde se encuentran pastizales nativos y es zona de matorrales de color café, donde llegan mayor concentración de aves del mismo color, y no se debe pretender cambiar por otro tipo de vegetación verde, porque así es como se da en ese espacio.
Recordó que algunas personas ingresan con sus vehículos por lo que es necesario que al momento de ingresar no perjudiquen el entorno. Más que reforestar apuntó que es necesario un plan específico de cuidado y preservación por zona, un plano ordenado y sobre todo más amor a los parques por vecinos, visitantes y autoridades.
Jorge Pérez Romero titular de Servicios Públicos Municipales, había detallado que en el Parque Guadiana diariamente se riegan 8 mil metros cuadrados de pasto con pipa y otras 5 mil áreas verdes de manera manual.
Para el cuidado de la población y de los propios árboles los días que se presentan rachas de viento fuertes o lluvias, se monitorean para evitar que puedan generar algún riesgo, en casos de vientos demasiado fuertes se toma la determinación de cerrar las instalaciones.